Victoria y partidazo del Real Betis ante un Getafe al que pudo golear perfectamente si no se hubiera encontrado con el palo hasta en cuatro ocasiones. Controló el partido de principio a fin, no dio opción a los azulones y el doblete de Willian José le da tres puntos que sirven para encaramarse en el tren de Europa.
No era fácil. Es más, era bastante posible que el Betis hiciera gala del noble arte del petardazo al que nos tiene acostumbrado. Llegaba el colista, el Getafe de Michel, con cero puntos en su casillero, y el Betis venía de ganar con garantías a Osasuna y la posibilidad de auparse a la zona noble de la tabla. Los verdiblancos hoy no solo jugaban contra el rival de turno, se enfrentaban a su propia historia. A su ADN.
Pero no hubo tiempo ni momento para el sufrimiento. El Betis controló el partido desde que Jaime Latre pitó el comienzo y hasta el final. No dio opción a un Getafe voluntarioso, con hambre de puntos, que no jugó mal, pero que se puede dar con un canto en los dientes por lo corto del resultado. El Betis generó ocho ocasiones de gol, casi una veintena de tiros y hasta cuatro balones al palo. El único pero en los de Pellegrini en el día de hoy, que sacó el once esperado por todos, premiando a Willian José y Juanmi en el ataque tras sus goles en Pamplona. Por detrás, Fekir y Canales junto a un inconmensurable William Carvalho, que está demostrando no solo ser un jugador más que válido para este equipo, sino que es de los mejores en su posición cuando quiere. Festival de pases, recuperaciones, distribución de juego. El Getafe era un muñeco que solo podía correr al son del portugués… y de Fekir. El francés a este nivel puede ser el mejor jugador de LaLiga sin lugar para la exageración. A este nivel de implicación y genialidad es único. Hoy volvió a echarse al equipo a la espalda y de sus botas salió el primer gol de la noche, sacando desde mediocampo un balón recuperado por William Carvalho, metiéndose en el área y cediendo -con quizás poca intención de ceder- el balón para un Willian José que no se lo pensó a la hora de definir y hacer el primero.
El Betis tuvo contra las cuerdas al Getafe durante mucho tiempo y volvió a pecar de falta de colmillo para rematar a un equipo muerto que salió respondón cuando pudo. Fekir se vió con el larguero en un disparo espectacular y ajustado con la zurda, que si llega a entrar se tiene que parar el partido un rato. En la segunda parte, el cuadro de Pellegrini se relajó y dejó la pelota por momentos al rival, pero el Getafe era un pollo sin cabeza, con pocas ideas, queriendo marcar antes de llegar al área. No generó peligro para un Claudio Bravo que volvió a demostrar la seguridad de su veteranía en cada balón que llegaba por sus fueros. El segundo no tardaría en llegar. Jugadón del Betis entre Fekir y Bellerín, cede al área, un defensor despeja, le golpea a un compañero y le cae en el pie a Willian José para hacer el segundo.
Pero pudieron ser muchos más. Entre Rodri y Borja Iglesias, que entraron en la segunda parte, pudieron doblar el marcador. Primero el de Talalluela con un disparo con la zurda que se estrella en la madera y el rechace lo cabecea Borja, dando también en el palo. El propio Borja se sacó un disparo fuerte con la diestra dentro del área que Soria atina para sacar la manopla, pero el balón en vez de colarse da en el larguero. También en la segunda parte, disparo de Fekir con toda la intención y que Soria adivina parando abajo con muchos reflejos. El Getafe, por su parte, nada de nada en ataque. Corrió, peleó, hizo faltas, incomodó a veces la salida de balón, pero el Betis con la pelota fue un dolor de cabeza constante para los de Michel.
Tres puntos más y ya son doce, igualando al FC Barcelona en la sexta posición y a solo dos de los puestos de Champions. Ahora toca resetear y ponerse en modo Europa League, la verdadera prueba de exigencia de un Betis que compite juegue quién juegue. El Ferencvaros ya espera en Budapest.
