El Real Betis recupera las sensaciones perdidas tras arrollar al Elche CF con una sensacional primera media hora de partido, en la que encarriló el encuentro anotando tres goles. Después se desinfló, especuló, se dedicó a aguantar y supo dejar la portería a cero para volver a ganar, sumar 24 puntos e ir al partido de Europa ante el Ferencvaros con más aire.
Así sí. El Betis fue un auténtico ciclón para un Elche que salió al verde del Martínez Valero sin saber lo que se le venía encima. Tras un primer aviso de Alex Moreno subiendo la banda y mandando al lateral de la red el disparo con la zurda, Juanmi aprovecha un pase del lateral catalán tras un mal saque de falta por parte del Elche, que regaló la pelota. El de Coín se plantó ante Edgar Badía y no falló en el mano a mano, anotando un nuevo gol en su cuenta particular y adelantando a los verdiblancos a los doce minutos de partido. Poco tardía el Betis en hacer el segundo, aprovechando Willian José un penalti de Barragán sobre el propio Juanmi. El ex del Betis pisa levemente al delantero malagueño cuando éste ya tenía la pelota y la posición perdida, pero el colegiado Pizarro Gómez entendió como punible. El brasileño no falló y también volvió a ver puerta.
Y si era penalti el pisotón de Barragán a Juanmi, más era como arrolló el meta Badía a Bellerín apenas un par de minutos después, pero el colegiado, haciendo gala de la poca valentía del comité, no lo quiso pitar. Demasiado penalti ya para tan poco tiempo, pensaría. Menos mal que un par de minutos después llegaría el tercero y definitivo. Punterón de Nabil Fekir contra el que no puede hacer nada el portero y 0-3 en apenas 26 minutos.
Y se acabó el Betis. Hubo una especie de intentona en marcar el cuarto, pero el paso atrás y el relajamiento era mucho más tentador y los verdiblancos le perdieron la cara al partido. Sin la posesión, el Elche se vino arriba teniendo más la pelota y apareció por el partido, acercándose más al área hoy defendida por Rui Silva y generando algún tipo de peligro, pero sin tiros a puerta.
Tras el descanso el Betis entendió que no podía aguantar 45 minutos metido en su área y la presión alta sirvió para que el Elche no estuviera tan cómodo con la pelota. Apenas hubo más acercamientos al área del Elche, los de Escribá llegaban más y la expulsión de Bellerín le dio más intranquilidad al partido. El catalán tuvo que trastabillar al delantero ilicitano que se marchaba solo ante Rui Silva, levemente y con mucho cuento del mismo, pero Pizarro Gómez entendió como roja directa por la ocasión manifiesta.
Tres cabezazos dentro del área entre Lucas Pérez y Guido Carrillo a los que respondió muy bien Rui Silva y un mano a mano con del ex del Arsenal y el Depor que sacó al portugués fueron las únicas llegadas con cierto peligro del Elche en toda la segunda parte, que no fue capaz de aprovechar la superioridad numérica y ante el que el Betis supo sufrir en defensa, no pasar apuros y tener una segunda parte más que plácida con el resultado tan amplio.
El Betis logra la mejor victoria fuera de casa de la era Pellegrini, se mantiene quinto y a un punto de la Champions, mete distancia con los perseguidores y recupera sensaciones muy necesarias para afrontar el doble enfrentamiento en casa de esta semana con otro aire.
