El Real Betis de Pellegrini superó con comodidad al HJK Helsinki en Heliópolis y ya piensa únicamente en El Gran Derbi de este domingo frente al conjunto sevillista. Los béticos, ambiciosos y competitivos, fueron de lleno a por el partido y doblegaron sin problema alguno a un limitado y replegado Helsinki.
Lo cierto es que el partido no tuvo una gran historia. El bloque verdiblanco dominó el transcurrir del duelo mediante el buen trato del balón, la presión tras pérdida y un claro dominio en ambas áreas, demostrando la diferencia de nivel entre ambos equipos. Apoyándose en un soberbio William Carvalho, que prácticamente jugó a trote, los locales iban generando superioridades por dentro y por fuera y acumulando ocasiones de gol cada vez más claras. Destacar, claro, el papel de Youssouf Sabaly en la derecha, el descaro de Luiz Henrique, la solidez de Paul Akouokou y el protagonismo de Rodri Sánchez.
El resultado pudo ser más abultado aún, pero los hombres de ataque no afinaron en el último toque y erraron varias situaciones claras. Sí atinó Aitor Ruibal, con un verdadero golazo y otro remate de ‘9’, y Nabil Fekir, ya en el tiempo de descuento. El debut de Dani Pérez y el reparto de minutos para algunos titulares como Carvalho, Fekir, Canales o Borja Iglesias fueron los sucesos más interesantes de un enfrentamiento cómodo, tranquilo y positivo para los chicos del Ingeniero.