Quedan días para que acabe el 2022, un año que se recordará como mágico e inolvidable para todo el beticismo. Un año que también, a nivel personal, ha sido muy especial por varios motivos y en los que el Betis prácticamente siempre ha estado presente.
A los pupilos de Manuel Pellegrini les queda un último partido de Liga antes de que llegue el 2023 para hacernos disfrutar, esperemos, de una victoria en el Benito Villamarín contra el Athletic Club. Justo después de este encuentro que se disputará el 29 de diciembre, jugaríamos los dieciseiavos de la Copa del Rey (además, en el caso de que pasemos de ronda se jugarían los octavos y cuartos), el 8 de enero visitaríamos Vallecas como antesala de la Supercopa de España, siendo el 12 de enero cuando nos enfrentamos al FC Barcelona, por último, visitaríamos al RCD Espanyol y al Getafe. Se viene un mes cargado de partidos y donde Pellegrini tendrá que gestionar la plantilla para evitar males mayores y seguir luchando por estar en la zona alta de la clasificación.
Quiero aprovechar estas líneas para mencionar a personas que son especiales para mi, como mi hermana Ángela por aconsejarme y ver la luz en los momentos más oscuros, a Sara y Álvaro por estar siempre al pie del cañón y sentir las 13 barras con tanto cariño, a Sonia por llegar y enamorarme con su luz y que haya sido el Betis quien lo hiciera posible, y a toda mi familia y amigos por estar siempre ahí, apoyándome y dándome ese último aliento.
Ojalá el 2023 sea también un año para el recuerdo y nuestro Betis nos dé a todos muchas alegrías. Sin más, solo desearos felices fiestas a todos y cada uno de vosotros, que vuestros propósitos se cumplan y que podáis disfrutar de estos días tan especiales con vuestra familias y amigos.