El Real Betis Baloncesto tiene por delante dos partidos a domicilio seguidos. El primero de ellos, el miércoles 13 de marzo, ante Tizona, a las 20:30. Después, el equipo tendrá que enfrentarse a Cantabria el domingo. El Plantío burgalés será el lugar donde los de Savignani probarán cuánto han mejorado estas últimas fechas. Curiosamente fue contra Tizona, en la Jornada 7, cuando Bruno Savignani se estrenó en el banquillo bético. Ahora, el técnico del Real Betis Baloncesto valora las posibilidades de su equipo, en línea ascendente, antes de un partido crucial. Tras la victoria ante Melilla en la Jornada 23 y la derrota de Ourense ante Lleida, el equipo verdiblanco ocupa la tan ansiada última plaza de playoffs.
Cómo llega el equipo
El técnico bético asegura que la semana de entrenos ha sido buena, con cuidado en su planificación, para que todos los jugadores lleguen a tono. Berzins, que apenas jugó un minuto contra Melilla por un golpe en el hombro, no se perderá el choque en El Plantío, en palabras de Savignani. Será un partido duro, aunque el Betis viene con la moral alta, tras dos victorias en casa ante Fuenlabrada y Melilla. En esta última, que fue holgada, el entrenador pudo hacer rotaciones y dar descanso a los titulares, mientras que Tizona viene de perder tras dos prórrogas ante San Pablo. A ese respecto, se centra sólo en lo que está en su mano: «Planificamos esta semana con cuidado porque tenemos dos viajes largos y dos partidos importantes. Sabemos que Tizona juega con muchas rotaciones, en el último partido, aunque se jugaron dos prórrogas, nadie pasó de 31 minutos«.
Aislarse del ruido exterior
No han sido pocos los vaivenes que han sacudido el barco del capitán Savignani esta temporada. Con las últimas (y negativas) noticias que llegan de México, el entrenador intenta que no influya en el plano deportivo: «No llega mucho de México, yo sólo pienso en preparar de la mejor manera posible al equipo para que sea competitivo en cada batalla que tenemos, y consecuentemente traiga victorias». También comentó la posibilidad de ocupar la plaza de jugador americano que Frazier, tras su controvertida marcha, dejó libre: «El club está haciendo las cosas de la mejor forma posible. Hablo con la gente del club y si podemos mejorar, bien; si no, tenemos que ser realistas y saber dónde estamos».
Al hilo de las dificultades que ha superado el equipo, Savignani defiende que el equipo debe sentirse orgulloso, «sobre todo, por la mentalidad». El técnico defiende que afrontan cada partido «como si fuera el último, con la ilusión de competir para sacar una victoria más. Eso nos muestra que hay que seguir así, y la única cosa que podemos controlar es seguir trabajando como equipo. Así podremos mantener la plaza y seremos cada vez mejores». A pesar de haber escalado ya hasta la 9ª plaza, sabe que queda mucho por recorrer.
Las amenazas en el juego de Tizona
Savignani sabe que Tizona es uno de los «cocos» de la competición, incluso tras la marcha de uno de sus referentes a la ACB, como Dídac Cuevas. En concreto, el entrenador se centra en el cuidado de balón: «Es un equipo que juega con una intensidad y una agresividad muy grande en defensa. Tenemos que evitar hacer un número grande de pérdidas. En la ida eso nos penalizó mucho; en mi primer partido aquí hicimos un muy buen partido, pero las pérdidas (21) nos pesaron. Ahora estamos más equilibrados, somos más conscientes y controlamos mejor las situaciones y los ritmos del partido».
También, aludiendo a ese choque de la primera vuelta, considera crucial estar concentrados los 40 minutos: «Tizona lo hace muy bien desde el inicio y es muy peligroso. Si los dejas jugar a su ritmo es muy difícil seguirlos. Nunca van a desistir. lo sabemos y lo sentimos en nuestra propia piel; llegamos a estar +14 y al final al final del partido íbamos ganando de cinco puntos a falta de 50 segundos y al final perdimos el partido». Por último, resaltó que la plantilla anhela duelos como este: «El equipo tiene muy claro que es de los partidos que a nosotros nos gusta jugar, son desafíos grandes contra equipos que están en lo alto de la clasificación y obviamente nos sirven para medir dónde estamos y para qué estamos».