El Betis Féminas no consigue sumar en casa frente al Granadilla de Tenerife en el reencuentro de Francis Díaz con su exequipo. José Herrera, entrenador de las tinerfeñas y antiguo segundo entrenador de Francis, le ganó la partida a su antecesor. Ambos equipos buscaban hoy su primera victoria de la temporada y fueron las de las islas quienes sumaron los tres puntos.
Francis optó por repetir la fórmula que tan bien salió frente a la Real Sociedad. Nuevamente salieron de titulares hasta cinco centrocampistas aunque el plan de partido fue bien distinto. Hoy las verdiblancas tuvieron que llevar el peso del juego mientras que las tinerfeñas esperaban su oportunidad a la contra. Y bien que supieron aprovecharla. Antes de que se cumpliese el primer cuarto de hora, un error a la hora de tirar la línea de fuera de juego en el medio del campo dejó a Gisela Robledo con campo para correr. La delantera colombiana se plantó frente a Malena y con un potente disparo la batió por alto.
A pesar del gol en contra el Betis no se vino abajo. El Granadilla apenas volvió a pisar el área verdiblanca mientras las verdiblancas crecían en el encuentro. Ángela Sosa tuvo el empate con un disparo desde dentro del área pero no impactó bien con el balón y su tiro se fue alto. El gol no llegaba hasta que Rinsola Babajide se lo inventó de la nada. La inglesa recibió el balón de espaldas y a pesar de estar cubierta por dos defensas consiguió darse la vuelta y sacar un disparo raso para firmar el empate.
El Granadilla salió a la segunda parte con mucha más mordiente y presionando la salida de balón bética. Cuando las verdiblancas parecían desquitarse de esta presión, incluso con alguna ocasión clara, llegó el segundo de las tinerfeñas desde el punto de penalti. María Valle cometió un penalti muy protestado pero que la árbitra no dudo en señalar, La pena máxima la convirtió Pisco que engañó a Malena. A diferencia del primer gol este dejó tocado al Betis. Las de Francis empezaron a notar el cansancio y apenas conseguían llegar al área contraria con peligro. Estuvo más cerca el tercero visitante que el segundo de las locales que gracias a Malena evitaron una goleada mayor.