Feliz año mis Béticos y Béticas del universo. Nos encontramos en un punto de inflexión bastante interesante en muchos aspectos. Parece que en 2022 sí que sí. En lo que a nuestro Real Betis concierne, puede y debería ser el año de la consolidación.
Empezamos con un apunte: ¿recordáis cuándo nuestra madre o nuestro padre nos decía aquello de «porque lo digo yo»? ¿Y cuando tu jefe o tu jefa te dice eso de «aquí mando yo»? ¿O cuándo tu profe te dice que no te aprueba ese 4,9 porque no te puede aprobar y si te quejas te pone un parte? En todos estos ejemplos falla algo: las formas. La no argumentación. Pues lo mismo pasa con los árbitros.
En esto deberíamos coincidir todos: las vacunas funcionan, la tierra no es plana y la nieve no es de plástico. Pero aún así hay gente que no está de acuerdo con nosotros, por lo que sea. Y ahora, con los árbitros, ha nacido un nuevo colectivo negacionista. Yo los voy a llamar los «negacionistas de lo justo». Tiene título de la nueva peli de Zack Snyder. Incluso ya tienen su frase fan service que nos hará saltar de nuestras butacas: si no te gusta lo que ves, mira para otro lado. Bastante mejor que el «Avengers, assemble», la verdad.
Si no la habéis visto, os recomiendo encarecidamente «No Mires Arriba», que retrata a la perfección el momento que estamos viviendo en la sociedad, donde se niega lo evidente, mandan las redes sociales y los medios de comunicación malcomunican. No hace falta que os diga a qué me suena esto.
Volviendo al tema que nos ha traído aquí y por ir uniendo todas las ideas que hemos leído, los árbitros se pueden equivocar como cualquier persona, pero hay un reglamento que se debe cumplir. Igual que yo no conduzco a más velocidad de la permitida o no robo de una tienda porque me van a sancionar al no cumplir el reglamento, a los árbitros (de campo y de VAR) se les tendría que hacer lo mismo, pero no. Porque quien manda es como ellos y porque los que llevan el VAR (recordemos que es la herramienta que se inventó para que las acciones polémicas se deban revisar para evitar los fallos humanos) son igual que los que están en el campo. Con este cóctel, LaLiga está muy lejos de ser la mejor de Europa. Es muy triste lo que pasa en nuestros campos cada fin de semana, y más triste aún ver que nadie con dos dedos de frente hace nada. Bueno, sí han hecho, sacarse una foto todos juntos para demostrarnos que en esto es lo que dicen ellos, porque mandan ellos, y si te quejas te sancionan.
A 48 horas de un derbi copero que hará que la ciudad y un poco el mundo del fútbol se paralice, con un 2022 por delante, ya con El Mago, El Panda, El Genio y El Ingeniero renovados, con la obligación de volver a conseguir billete europeo y el reto de llegar lo más lejos posible en la Europa League, y por desgracia tenemos que hablar de otros temas. No miren ni arriba, ni abajo, ni para otro lado. Miren de frente.
