Tras el parón del mundial, el juego mostrado por el Betis dista mucho de lo que se
espera de este equipo. La eliminación copera parece que ha mermado los ánimos
de unos futbolistas que no están a su mejor nivel. La derrota ante el Celta fue, para
algunos seguidores, la gota que colmó el vaso. Y más aún, vistos los resultados que
se dieron en la jornada, ya que pincharon todos los rivales directos de los
verdiblancos.
El Villamarín animaba a sus jugadores, que lograron darle la vuelta al partido en
cosa de 15 minutos, después de que el Celta se adelantase en el minuto 6. Al filo
del descanso, los gallegos iban a poner de nuevo las tablas en el marcador.
El estadio seguía animando, quedaban 45 minutos por delante para hacer que los 3
puntos se quedasen en el Villamarín, donde el Betis no logra una victoria desde el
pasado 3 de noviembre, en el choque europeo ante el HJK.
Tras la victoria del Rayo, el Betis está séptimo, fuera de puestos europeos, pero con
muchos partidos todavía por delante para revertir la situación. ¿Se han perdido
oportunidades de engancharnos arriba? Sí, pero no es motivo para que cunda el
pánico. Este fin de semana puede servir para recuperar la racha, aunque el Almería,
en su estadio, no lo pondrá fácil. Yo, personalmente, sigo confiando en este equipo y
no voy a dejar que una mala racha me quite la fe de que se pueden conseguir cosas
muy bonitas este año.
Almería, Valladolid y Elche, tres partidos que pueden servir para que los
verdiblancos vuelvan a engancharse a la zona alta de la tabla y a recuperar las
buenas sensaciones. Eso sí, esperemos que en ninguno de estos partidos volvamos
a ver una expulsión, porque el tema de las rojas a los jugadores del Betis sí que me
preocupa.