Hace cuestión de unos días hemos conocido a través de Canal Sur Radio, tal y como adelantó Tomás Furest, la salida de la secretaría técnica del Real Betis Balompié de Ángel Luis Catalina y Jesús Sánchez. Ambos llegaron justo con la salida de Lorenzo Serra Ferrer y avalados por José Miguel López Catalán.
A la salida del Vicepresidente Deportivo se produjo una rueda de prensa para exponer al aficionado bético el nuevo organigrama de la Secretaría Técnica por parte del Presidente Ángel Haro y del Consejero Delegado José Miguel López Catalán. Recordando las palabras del Presidente: “No se ha querido forzar la salida de Lorenzo Serra Ferrer. Se le ha intentado explicar por activa y por pasiva que era por el crecimiento del Real Betis Balompié. Nos mueve únicamente el interés del Betis. La decisión se ha tomado consensuadamente” “Había razones para emprender un cambio en la forma de trabajar en el área deportiva. Estamos convencidos de que esto nos va a seguir ayudando a crecer y nos reforzamos en nuestra decisión. Seguiremos respetando siempre la figura de Lorenzo Serra Ferrer”
Pues la transformación del área deportiva que era tan necesaria y que supuso relegar a Serra al ostracismo institucional, algo que no aceptó y supuso su marcha del Betis, ha durado la friolera de un año. Antonio Cordón ha acabado en apenas cuatro meses con la obra de Catalán de un plumazo. Todas las novedosas bondades que traía consigo la llegada de nombres como Catalina y Jesús Sánchez unidos al famoso Bigdata, se tradujo en una planificación deportiva desastrosa dejando al equipo el décimo quinto clasificado en liga, eliminado por un segunda lleno de suplentes en la Copa de SM el Rey y con una plantilla tan devaluada que apenas se han recibido ofertas decentes por integrantes de la misma.
Era el propio Catalán quien ante los micrófonos de Al final de la Palmera, decía aquello de “Lorenzo Serra Ferrer no era un Director Deportivo Profesional”, ¡Hay que tenerlos cuadraos! Pues no salgan de su asombro, el principal responsable de esa maniobra que supuso el inicio de una guerra civil en las gradas del Villamarín, campa a sus anchas chaqueta en mano sin asumir ningún tipo de responsabilidad. Nadie tiene dudas ya de quien era el artífice de los fichajes del Real Betis en la sombra, por mucho que nos hayan querido vender que el pobre de Alexis Trujillo era quien dirigía la faceta deportiva.
El “capricho” del Consejero Delegado ha salido mal y caro para las arcas del Betis, sin que nadie sea capaz de ponerle el cascabel al gato. ¿Saldrá el Señor José Miguel López Catalán a pedir perdón a la parroquia bética por menospreciar, ningunear, vilipendiar… A una figura como Lorenzo Serra Ferrer alegando falta de profesionalidad y supuesto crecimiento cuando su proyecto ha durado la ridícula e inasumible cifra de un año? Permítanme que lo dude.
Desde El Estrado Bético no nos cansaremos de señalar a este Señor como uno de los principales protagonistas y responsables de la ruina económica que atraviesa el Betis, aunque algunos quieran seguir escuchando cantos de sirena en un escenario en el que se negocian con jugadores, aplazamientos de nóminas.
Ni perdono, ni olvido.