Victoria del Real Betis ante el Levante UD que se adelantó en el primer remate a puerta y no fue capaz de aguantar la ventaja ante un vendaval de futbol y ganas, que es este Betis de Pellegrini. Un hat-trick de Juanmi, el primer de su carrera, sirvió para ganar el partido, seguir en la pelea, meter distancia con los perseguidores y alimentar el hambre de este equipo.
Ganó el Betis y parece hasta normal. Manuel Pellegrini ha acostumbrado a los béticos a que, pase lo que pase, se gana. Hoy lo que pasó fue que el Levante UD, colista de LaLiga, se adelantó en el minuto seis al rematar Mustafi un córner y colocarla fuerte e imposible para Rui Silva. Los gritos de “Betis,Betis” de un muy poblado Villamarín fueron la respuesta lógica de una afición que sabe que este partido se hubiera perdido en otros tiempos. Hoy no. Y no fue así. Pese a que el Levante generó peligro e incertidumbre en balones largos que comprometían a la defensa bética, los de casa comenzaron a tener ocasiones claras y a merecer el empate. Un disparo de Alex Moreno con el exterior que se va desviado rozando el palo, un cabezazo de Guido tras un córner contra el que saca la manopla Cárdenas, y un disparo de Canales con la pierna buena a la que imprime demasiada potencia y se va por arriba cuando todo el estadio cantaba el gol. Al descanso nos íbamos con derrota, pero con el sabor de haber marcado el camino, al que solo le faltaba acertar.
Y así fue. En el 54’, jugada rápida del Betis que comienza con Willian José recibiendo en campo propio y de espaldas, abre para Canales y éste se pega la carrera hasta el pico del área, donde hace la pared con Fekir. Canales intenta el centro, rebota en un defensa, Fekir mete la pierna valiente y logra que caiga a los pies de Willian José, éste ve a Juanmi en el corazón del área y el de Coín con el interior la clava fuerte y precisa a media altura para hacer el empate. Premio para el Betis y premio a la perseverancia.
El segundo sería unos nueve minutos después, con el Betis volcado en la remontada y el Levante pensando más en no perder que en volver a generar peligro. Pero un córner que bota Fekir lo peina Willian José y de nuevo aparece el ratón Juanmi en área pequeña para empujarla dentro ante la pasividad del portero visitante. Remontada finalizada y cabeza fría. Pellegrini no tuvo tiempo para celebrarlo. Llamó a Víctor Ruiz para las indicaciones precisas: cabeza, no complicarse, cuidado con Soldado y Morales…
Pero este Betis no renunció al ataque, y espoleado por los suyos fue a buscar el tercero. Llegó y con intriga. El juez de línea anuló el tercero de Juanmi por fuera de juego previo de un Fekir que cuarto y mitad del gol es obra suya. Por la carrera, el control, el temple y el pase al malagueño. Más de dos y tres minutos tardó el VAR en validar el gol por lo milimétrico del asunto. Y dicho sea de paso y por hacer honor, no se vio una repetición clara que sirviera para una cosa o la contraria, fruto de lo difícil que son ese tipo de jugadas y lo mucho que se complica el VAR con las líneas. Al final, gol válido y hat-trick de un Juanmi que lo celebró desacafeinadamente por la revisión, pero que valía igual.
El Betis vuelve a sumar tres puntos en la lucha por llegar lo más alto posible, como dice Pellegrini. Fekir vio la quinta amarilla y no estará en el Camp Nou en un partido importante ante un rival directo por los puestos de Europa, pero antes tendrá que ponerse en modo Copa y pensar en el partido ante el CFI de Alicante del próximo miércoles.
