Plan XXII: Estreno a la antigua

Juanmi fue Messi. Y no hace falta entrar en comparaciones futbolísticas, porque no las hay. Pero sí el GOAT del Camp Nou, esta vez, llevaba la camiseta del Real Betis es porque, esta vez, ‘O Rei’ se encargó de hacer exactamente lo mismo que habría hecho el astro argentino. Un proyecto como el del FC Barcelona siempre tuvo a un jefe de obras capaz de rematar cualquier jornada laboral con éxito. No le hacía ni siquiera falta que el balance del día fuera positivo, ya que él solo se bastaba para cambiar el rumbo de la obra. Y es que muchos –o casi todos– fueron los encuentros en los que, con un guion de partido similar, en el que el conjunto de las trece barras supo tanto sufrir como hacer sufrir, eran los culés quienes terminaban llevándose el botín por culpa del de siempre. Ahora, sin Leo Messi sobre el terreno de juego, las tornas cambiaron. El encargado de resolver el partido y darle una inyección de confianza (por si no tenía ya suficiente) al Plan 2.0 de Manuel Pellegrini fue el Balón de Oro bético.

Porque, tal y como afirmó el Ingeniero, ganar al FC Barcelona en su casa no es algo que se consiga todos los días. Es más, para los pupilos del técnico chileno fue el gran estreno del Plan en los grandes escaparates. Ha tardado en llegar, pero ha llegado. La obra de los verdiblancos va viento en popa. El ritmo de trabajo es frenético. Pero a esta le hacía falta colocar la primera gran piedra del proyecto. Y bien que lo hizo. Hace algo más de un año y medio desde que el Real Betis de Manuel Pellegrini dio sus primeros pasos, y la progresión del equipo había sido envidiable. Pero si algo se le podía achacar al Ingeniero es que, algo más de un año y medio después de su llegada, los verdiblancos habían sido capaces de doblegar a un rival de altura. De situarse en lo más alto de los andamios y mirar, por fin, de tú a tú a los mejores planes de LaLiga. No deja de ser una novedad el hablar de la primera gran victoria de la era Manuel Pellegrini, aunque quienes la protagonizaron tienen poco de novedosos.

Al final, al jefe de obras verdiblanco no le hicieron falta experimentos ni rediseños del Plan para asaltar las oficinas de Can Barça. La victoria ante los de Xavi Hernández fue coral, pero también tuvo tintes individualistas. Y entre esos nombres no hay más que el de un futbolista el cual está convirtiendo en costumbre el darle tres puntos a su equipo con sus goles y el de un futbolista cuyo renacer futbolístico durante el mes de noviembre ha sido una grata noticia para la parroquia verdiblanca. Viejos conocidos. Juan Miguel llenó de color las oficinas del Real Betis, pero Marc Bartra fue el encargado de construir un muro inquebrantable. El mismo Marc Bartra al que, entre bajas médicas y absentismo laboral, parecía habérsele olvidado todo lo bueno que ofreció al equipo de trabajo bético en planes anteriores. Hacía mucho tiempo que el central catalán no era lo que fue. Porque no, Marc Bartra quizás no sea, por condiciones, ni el mejor zaguero que tiene Manuel Pellegrini en liza, pero sí un futbolista capaz de hacer del Real Betis un equipo campeón.