Tras la victoria en la Copa del Rey frente al Real Valladolid, el Betis de Pellegrini visitaba Vallecas con el objetivo de lograr el segundo triunfo consecutivo. Para ello, partía con Rui Silva en portería, Bellerín, Edgar, Bartra y Álex Moreno en la línea defensiva, Guido con William Carvalho en doble pivote y Borja Iglesias por delante del trío Tello, Fekir y Canales.
El partido entre dos de los equipos más vistosos de la competición estaba siendo muy igualado; ambos conjuntos presionándose arriba, saliendo bien desde atrás, logrando transitar… todo hacía indicar que el encuentro adquiría un rumbo similar al de la ida. Tramos de posesión para ambos, llegadas al último tercio… hasta la incoherente, absurda e inexplicable decisión de Muñiz Ruiz en la acción entre Álex Moreno e Isi Palazón. A raíz de la expulsión los del Ingeniero defienden en 4-4-1 con Nabil Fekir en punta y Guardado en el lateral zurdo.
Pese a estar con un efectivo menos desde el minuto 33, los verdiblancos continuaron siendo superiores. Se plantaron bien en el césped ganando duelos, estando sólido atrás y mostrándose muy finos con el balón. De ese dominio se produce el 0-1 tras una maravillosa transición. A raíz de ahí, y con un segundo tiempo de máxima exigencia por delante, los de Heliópolis cuajaron un trabajo formidable sin el balón para proteger el resultado. Marc Bartra junto a Edgar sólidos en área propia, Rui Silva completando acciones espectaculares, Guido apagando fuegos… un trabajo espectacular de todo el bloque para lograr un valiosísimo punto.
La extramotivación del grupo por las decisiones arbitrales, el esfuerzo colectivo y un magnífico nivel en área propia dieron al Betis del Ingeniero un punto trabajado y merecido.