El Real Betis deja en nada un gran partido ante el Atlético de Madrid donde los rojiblancos supieron encontrar excesivo premio en las bajas en la defensa verdiblanca. El Betis tuvo más y mejores ocasiones, sobre todo en la primera parte, para que el resultado fuera más justo. Los verdiblancos salen de puestos de Champions después de once jornadas seguidas.
El mismo guion de siempre. El juego del Atlético de Madrid se le enquista siempre a este Betis. No sabe controlarlo, no sabe hacerle daño y no sabe evitar que se lleve siempre el premio de la manera más injusta. Hoy el Betis, otra vez, jugó mejor, llegó más y tuvo más la posesión. Pero los goles los pusieron los de Simeone y eso, al menos de momento, siempre es sinónimo de victoria.
Porque un partido que comienza con un gol a los 70 segundos… Es sintomático. Cuadra Fernández, muy desafortunado hoy, se inventa una falta de Aitor Ruibal en la carga con Llorente. Oblak saca en largo, la peina Lodi y sorprende a la defensa, Correa la pone rasa al área y Joao Felix remata empujándola en el segundo palo y sin oposición. Un Jaque Mate pastor a la altura de muy pocos, pero que siempre pilla al Betis desprevenido.
A raíz del gol el Atleti tiró del otro futbol que tan poco gusta, según lo use. Aunque el capítulo de lesiones tampoco ayudó a que la primera parte fuera fluida. Primero Guardado, que notó un pinchazo en el aductor y pidió el cambio. Después, Correa y Vrsaljko tuvieron que ser sustituidos antes del descanso. El Atleti sacó su modo más rácano y sucumbió ante un Betis que fue de menos a manos con la pelota en los pies. Joaquín y William Carvalho se echaron el equipo a las espaldas y la sangría defensiva mejoró, con un Paul dando un gran rendimiento y Sabaly activo presionando arriba. El Betis comenzó a generar llegadas y a merecer el gol. Un despeje bajo palos de Giménez rebota en la rodilla de Paul y sale inexplicablemente por encima del larguero. Pero antes del descanso, en los cinco minutos de alargue, Sabaly pelea una pelota dividida, provoca el fallo de Héctor Herrera y se la regala a Tello. Éste no se lo piensa y desde fuera del área la enchufa imparable para Oblak. El empate al descanso era justicia absoluta.
Tras la reanudación, el guion fue muy similar. El Atleti no quería abrirse en defensa y esperaba una y otra vez el error de los verdiblancos. Tello tuvo una muy clara en un ladeado mano a mano que Oblak manda al limbo con dos paradas seguidas, aunque también Felipe estrella en el palo un remate en un córner. El partido estaba en el aire y le salió cruz a un Betis valiente y con orgullo. Tello pierde una pelota con Ruibal acompañándole y deja todo el carril solo para que De Paul llegue al área y le regale el gol a Joao Felix, que otra vez solo tiene que empujarla entre los centrales.
Pellegrini movió el banquillo en busca de frescura. El Betis, con la pelota, seguía generando llegadas y disparos, pero el partido estaba como lo quería el rival. Y de nuevo encontró premio. Otro balón a la banda, Griezmann se va de un desafortunado Víctor Ruiz en el día de hoy, y en una jugada calcada al segundo gol, la pone al punto de penalti y Lemar de nuevo solo tiene que batir a Bravo.
El Real Betis tiró de orgullo, jugó el mejor partido de las últimas semanas, supo sacar rendimiento de las rotaciones y demostró que la losa de la Copa del Rey le estaba pensando en anteriores partidos, pero después de once jornadas los verdiblancos salen de puestos Champions, aunque quizás fuera lo natural más tarde o más temprano.
