El Real Betis tiene a un partido volverse a meter en unos cuartos de final de la Copa del Rey. El vigente campeón vuelve a casa para recibir a un Club Atlético Osasuna con ganas de seguir en esta competición y que llega tras una interesante victoria en Liga que lo coloca a un punto de la Champions.
Con muchas bajas, e importantes, pero la cita de esta noche en el Villamarín es de las que no se puede desperdiciar. El vigente campeón quiere estar entre los ochos mejores de una Copa del Rey con aromas de competición grande. Los emparejamientos de estos octavos de final auguran pocas sorpresas, así como un bombo en cuartos con la zona noble de LaLiga. Pero hay que jugar. El Betis cuenta con el factor campo, muy importante con esta remodelación de la competición Además, Osasuna no gana en el Villamarín desde la temporada 13/14, ante aquel Betis que se iba de cabeza a la Segunda División.
Todo en favor de un Betis que ha aprendido a no confiarse. Con las bajas de Rui Silva, Guardado, Juanmi, Juan Cruz, Joaquín y Fekir, Manuel Pellegrini deberá volver a hacer encaje de bolillos, no para sacar un once de garantías, pues el que sale es muy competitvo, pero sí para refrescar al equipo en la segunda parte y ante una posible prórroga, pues en el banquillo quedan Dani Marín, Montoya, Victor Ruiz, Edgar, Abner, Aitor Ruibal, Loren y Willian José. Intentar dejar el partido finiquitado cuanto antes puede ser un factor clave.
Por su parte, Osasuna llega crecido tras la victoria del pasado fin de semana ante el Mallorca, y que los deja a un punto de los puestos de Champions. Fuentes, Arnedo y Nastic de Tarragona han sido los rivales sobre los que ha pasado el conjunto de Jagoba Arrasate, que encadena cuatro de los últimos ocho partidos de Liga. Aunque las estadísticas contra el Betis no están a su favor, pues no gana en Heliópolis desde la temporada 13/14, la misma en la que consumó su última victoria ante los verdiblancos: ocho derrotas y un empate en los últimos nueve enfrentamientos ante el Betis es el bagaje de Osasuna en las últimas temporadas.
A las 21 horas de la noche rodará la pelota en el verde del Villamarín. La noche se antoja fría y las ganas de Betis podrán con todo. Solo falta ver si los de Manuel Pellegrini avivan la llama de la Copa o se extingue demasiado pronto.