«¿Qué le pasa a Canales?». Es, ha sido, y seguramente a corto plazo seguirá siendo la pregunta más repetida en los partidos del Real Betis Balompié en los últimos meses por parte de la afición.
Al final no es algo infundado. Es innegable que el nivel del santanderino ha bajado mucho. No está. Es intrascendente en el juego del equipo por momentos y en muchas ocasiones contraproducente. Él mismo ha admitido que no está a su mejor nivel.
Pero… ¿Realmente somos conscientes sobre quién estamos hablando? Ya sobra entrar de nuevo en detalle sobre los tópicos de las lesiones, el ejemplo de superación y todos esos detalles sobradamente alabados a lo largo de su carrera. Pero sería injusto no recordar que cayó tres veces. Tres. Y volvió, el capitán siempre vuelve.
Ya en sus temporadas en la Real Sociedad, tuvo momentos de dudas a nivel de juego (coincidiendo con dudas generales en el equipo), y con el tiempo, se fue convirtiendo en un jugador importantísimo. Precisamente cuando todo iba bien, se llevó el golpe con la lesión. Y se recuperó. Y no sólo se recuperó, fichó por el Betis convirtiéndose en buque insignia del equipo tanto para la afición como para cada uno de los entrenadores que ha tenido en Heliópolis.
Pero… Llegó una tanda de penaltis. Athletic Club. Benito Villamarín. Copa del Rey. Recuerden estos condicionantes. Sergio falló. A partir de ahí todos conocemos su bajón de rendimiento. Sus dudas. En ese momento el penalti supuso la primera piedra de un muro de dificultades que le costó mucho escalar.
Pero… ¿Sabéis que? Volvió. El capitán siempre vuelve. Y fue en Granada, donde sólo le faltaron los colores celestes, porque «la 10» y la clase ya las tenía. Gol maradoniano y rendimiento excelso a partir de ahí.
¿Ahora? Se pueden buscar muchos culpables. Que si no está jugando en su sitio, que si su estado físico, que si su bloqueo mental, que si un cúmulo de todo. Al final, todo esto es inútil. Es un jugador diferente. Es una persona diferente. Es Sergio Canales, el capitán.
Ahora tiene la oportunidad de ser de nuevo el dueño de su historia. Tanda de penaltis. Osasuna. Benito Villamarín. Copa del Rey. Es el momento de revelarse y recuperar el nivel. Porque él lo necesita. Porque la afición del Betis lo necesita. Y no tengáis duda de que lo va a hacer… Porque el capitán siempre vuelve.