El Real Betis presentó este lunes la nueva campaña de abonados, cuyas fechas y plazos han pillado desprevenidos a la gran mayoría de socios, que deberán renovar antes de que finalice el presente mes de junio.
El Betis se ha tomado esta temporada excesiva prisa en que las renovaciones de abonados estén finiquitadas lo antes posible. Los abonados deberán pasar por caja para renovar sus abonos, con un incremento entre un 6% y un 10% de media, antes del 29 de junio, con los derivados problemas económicos que siempre tienen en fechas últimas de cada mes. Y es que el Betis pretende presupuestar hasta 24 millones de euros antes de finalizar el ejercicio el próximo día 30, con el objetivo de que cuenten como ingresos de cara al plan de viabilidad de LaLiga y poder reducir sus problemas económicos antes del mercado de fichajes.
Se trata de la primera vez en época reciente que el Betis pone como fecha límite de renovación antes de que acabe el mes de junio. La pasada temporada el plazo de renovación era entre el 21 de junio y el 10 de julio; en la 21/22, entre el 5 y el 20 de julio; en la 20/21, entre el 14 de septiembre y el 1 de octubre por la pandemia; en la 19/20, entre el 28 de junio y el 29 de julio; y en la 18/19, con el Betis en Europa, entre el 6 de junio y el 7 de julio. Además, en esta ocasión los abonados apenas tendrán 15 días para decidir si quieren/puede renovar o buscar modos de financiación, que siempre ayudan a un importante desembolso a tocateja y a finales de mes previo al verano.
El Betis quiere tener presupuestados unos 24 millones de euros en abonos antes de la finalización del ejercicio del próximo 30 de junio. Se convertiría en el segundo mayor foco de ingresos del club por detrás de los derechos televisivos. El Betis además va a incrementar sus ingresos con respecto a la temporada pasada en unos 2.200.000 millones de euros con la subida de precios, que según el CEO Ramón Alarcón se corresponden a «uno o dos euros de media por partido».