Real Betis y Atlético de Madrid se reparten los puntos en la segunda jornada de la casi recién estrenada temporada 23/24 en un duelo muy igualado donde los verdiblancos quizás fueran mejores en el cómputo global, pero donde también sufrieron.
El Betis ha comenzado muy serio esta temporada. Tras la victoria en Villarreal, los verdiblancos recibían la visita del dentista en el estreno del Villamarín esta temporada. El Atlético de Madrid del Cholo, bestia negra de los verdiblancos, salió al verde timorato y en ese acostumbrado perfil bajo. El Betis dominaba, tenía la pelota y controlaba el ritmo del juego y aunque pareciera que los rojiblancos tenían bajo control la situación como en muchos otros enfrentamientos donde se acabaron llevando el gato al agua, la realidad es que el Atleti sufrió y sudó mucho en defensa.
Abner avisaba al poco de empezar con un disparo desde la frontal del área que se marchó rozando el palo de la portería de Oblak. Posteriormente sería Ayoze con un disparo colocado que se marchó fuera por poco, tocando en la red lateral y provocando que medio estadio cantara gol. El Betis fue mucho mejor que su rival en la primera parte pese a tremendo y desconcertante partido del colegiado De Burgos Bengoetxea, que dejó a Mario Hermoso todas las llaves de judo que le dio la gana para evitar que los atacantes béticos se llevaran los balones divididos.
Tras el descanso, el Atleti dio un lógico paso al frente y la entrada de Pablo Barrio por Marcos Llorente despertó a los del Cholo. El partido se igualó, pero el Betis seguía manteniendo la pelota lejos del área de Rui Silva, y sería de nuevo Ayoze el encargado de llevar el primer susto de la segunda parte, en una volea que se marchó fuera también por poco. Pero el Betis fue acusando el esfuerzo del partido y los cambios de Pellegrini le quitaron mordiente al equipo. Willian José no mejoró en nada a un Borja Iglesias que anduvo perdido entre los centrales rojiblancos; Rodri entró cuando el equipo ya no tenía un porcentaje de posesión necesario y Juan Cruz, más de lo mismo. El Atleti tuvo la pelota, pero no las ocasiones, salvo un cabezazo de Hermoso al bote de un corner al que tuvo Rui Silva que meter la manopla para evitar el gol.
Tras un alargue de seis minutos donde el miedo en el cuerpo de una posible derrota después de tanto remar parecía más un temor que una realidad por la disposición de dos equipos fatigados y firmando el empate, el colegiado decretó el final y el reparto de puntos se hizo efectivo. Los verdiblancos siguen invictos tras dos jornadas y suman cuatro puntos ante Villarreal y Atleti. La semana que viene tocará viajar al Nuevo San Mamés, otra prueba de fuego para este Betis todavía por hacer.