Tras clasificarse para la Final Four de Copa (que se jugará en Burgos, 24 y 25 de enero) en la eliminatoria contra Oviedo regresaban los béticos a casa. Como cuartos de liga, a tres victorias de una cima que sigue pareciendo inalcanzable: el ascenso directo que defiende, precisamente, San Pablo Burgos. Aun así los de Gonzalo García no dejan de intentarlo, a pesar de las innumerables bajas que obligan a hacer malabares con las rotaciones (y al fichaje temporal de Tunde Olumuyiwa para cubrir la ausencia de DeBisschop, como ya ocurrió con Atencia tras la lesión de Cvetkovic). Es complicado, pero no imposible, y los verdiblancos se agarran a sus opciones.
Veinte minutos de exhibición ofensiva
EL 5-0 inicial (Benite y Kasibabu) dejó paso a una contienda igualada en el primer periodo. La zona de Menorca quiso poner en problemas al Betis, que no se atascó demasiado. La defensa verdiblanca funcionó mejor, forzando tiros más complicados para Menorca, que no acertaba tanto. Tras el empate a 12 hizo el Betis ocho puntos seguidos para despegarse, y Atencia y Benite (2/2 en triples y 8 puntos) colocaron el 25-13. Arteaga, desde el rebote ofensivo (5 de Menorca en el cuarto), maquilló para cerrar 25 a 15 los primeros diez minutos.
Empezó el segundo como terminó el primero: canasta tras rebote ofensivo de Arteaga. Antes, Benite se jugó un “heat check” de tres forzadísimo que no entró; después llegó un triple de Domenech que sí lo hizo. Con casi cuatro minutos jugados llegó el +14 bético con un nuevo triple, esta vez de Hughes. Que los visitantes no pudieran anotar con fluidez era más culpa del empeño del Betis atrás que de la falta de calidad menorquina; se llegó al 47-26 con un triple de Jelinek. Dos pérdidas absurdas de los locales hicieron un favor a Menorca, que hizo nueve puntos seguidos. El 51-35 al descanso lo protagonizaron las 10 asistencias de Renfroe, los triples (9/13 bético) y una acertada defensa local.
Relajación en el tercero, sentencia en el cuarto
Bajó el ritmo considerablemente el ataque bético, sufriendo algo más la zona mixta de Javi Zamora. Menorca mejoró en defensa, sí, pero no fue capaz de igualar esas prestaciones en el otro aro. Eso dio tranquilidad a los locales, que llegaron al 63-41 y tenían margen para fallar en varios ataques consecutivos. Un 8-0 para Menorca al final de cuarto firmó el 63-47 en el luminoso, reacción que parecía inocua a falta de 10 minutos.
Con dos triples (Jelinek y Benite) los locales mantenían su distancia, una que se antojaba definitiva. Renfroe siguió asistiendo, Hughes, anotando, y Menorca no era capaz de dar un gran bocado al marcador. Como dato anecdótico los primeros puntos de Renfroe llegaron cuando ya llevaba 25 minutos en pista; el base zurdo anotó de tres para acompañar a sus 13 asistencias. Salió para dejar su plaza a Pablo Marín, y también disputó Kulishenko el intrascendente final del duelo. 89-65 se lo llevó el Betis para seguir invicto en casa, con un espectacular 15/27 en triples y 24 asistencias. Los de Gonzalo García siguen luchando frente a sus adversidades particulares, y aspiran a seguir en la cúspide de la tabla. A final de mes podrían dar la sorpresa y llevarse la Copa en Burgos, pero antes, en la jornada 17, visitan al otro titán de la liga: Fuenlabrada.
Ficha técnica
Real Betis Baloncesto – 89 (25+26+12+26): Renfroe (3), Benite (20), Jelinek (11), Radoncic (11), Kasibabu (13) -quinteto titular-, Marín (0), Hughes (19), Atencia (5), López de la Torre (2), Domenech (5) y Kulishenko (0).
Hestia Menorca – 65 (15+20+14+16): Figueras (11), Cone (6), McDonnell (10), Gómez (7), Stoilov (4) -quinteto titular-, Tanoh (1), Ivanov (5), Dike (2), Alderete (5), Molins (3), Lukovic (7) y Arteaga (4).
