Sergio Canales estará entre tres y cuatro meses de baja a causa de la lesión que sufrió en el inicio del encuentro España-Alemania disputado el pasado martes en La Cartuja y que, según las pruebas a las que se ha sometido el jugador, todo apunta a que le obligará a pasar por el quirófano para combatir ante la rotura en grado III con afectación del tendón en la musculatura isquiotibial izquierda. Una vez que pase la inflamación actual de la zona, los médicos del club y los especialistas consultados determinarán el tratamiento a seguir, pero en estos momentos la previsión es que tendrá que ser operado y no podrá volver con el Betis hasta finales de febrero o incluso marzo. Una baja muy sensible para los verdiblancos, que pierden a su mejor futbolista para el cuerpo de LaLiga.
Este tipo de roturas musculares completas tienen que ser tratadas por especialistas como fue el caso de Edu Schdmit, que tuvo que viajar a Finlandia para ser intervenido y estuvo varios meses de baja en la temporada 2008-09. Esta intervención afecta de manera seria en a la temporada del Betis, ya que Canales es un fijo en los planes de Pellegrini por su calidad y liderazgo.
El futbolista publicó varios comentarios a través de sus perfiles en las redes sociales y se mostraba con los suyos «muy animado» a pesar de la lesión. «Son momentos complicados. Ahora mismo, nada me duele más que no poder ayudar durante un tiempo a mis compañeros dentro del campo, a mi equipo. Pero lo haré fuera. Quizás la parte que más me está costando asimilar es pensar que le debo más a todo el betiscismo. Me siento tan agradecido por el cariño y respeto que recibo de los béticos cada día… Lo transformaré en fuerza, ganas y pasión para recuperarme y volver a disfrutar una vez más».
Una lesión de estas características tiene una cobertura económica de la FIFA, ya que se produjo jugando un partido oficial con la selección española. El Betis podría recibir de máximo hasta 20.548 euros por cada día que esté de baja Canales, aunque la cantidad exacta se calcula en función del salario del futbolista. Se trata de una indemnización contemplada en el programa de protección de clubes y que tiene vigencia hasta 2022. Dicha indemnización se calcula en función del salario fijo que reciba cada jugador y no se tienen en cuenta los importes variables, como las primas, las pagas extraordinarias o las cuotas por aparición. La FIFA sólo paga si la lesión le obliga a estar de baja más de 28 días, como lamentablemente es el caso.