Compitió y de que manera el Real Betis ante un Barça que dominó gran parte del partido, pero que siempre se vio superado cada vez que los verdiblancos se asomaban por el campo rival. El Betis jugó a eso que algunos llaman «como equipo pequeño» y puso contra las cuerdas a un Barça sin Messi, Pedri ni De Jong en la primera parte. Lenglet falló una clara al mandar fuera un remate franco dentro del área, pero era el Betis el que más sensación de peligro generaba con salidas rápidas desde atrás y las que solo le faltaban culminar con ese último pase que tanto vale en el fútbol. Apunto estuvo Juanmi de abrir la lata, pero su cabezazo algo forzado se fue lejos tras el centro medido de Borja Iglesias.
No fallaría el Panda la siguiente. Contra de libro del Betis que inicia Alex Moreno y rompe Fekir. El francés encuentra a Emerson que rompe por velocidad a Jordi Alba y su pase al corazón del área lo remata Borja Iglesias para hacer el primero. Premio para la inteligencia, el orden y la eficacia defensiva que el Betis estaba ejecutando. No es fácil jugarle así a todo un FC Barcelona, que apenas inquietó a Joel Robles más que un disparo potente de Pjanic que el meta madrileño sacó poderoso.
Tras el descanso, mismo guión. El Barça tenía la pelota pero era el Betis el que le sacaba los colores a a defensa azulgrana cada vez que salía con verticalidad. Apunto estuvo Juanmi de hacer el segundo en un forzado mano a mano tras espectacular pase de Fekir, pero Ter Stegen salió muy bien y la mandó a corner. En ese corner llegaría la polémica. Balón al primer palo que peina Mandi y acaba sacando la defensa. El argelino se queda tirado en el suelo y el árbitro, cuando la pelota salió fuera, espero noticias del VAR. En la repetición, un pisotón de Busquets en el talón del central bético que le impide peinar con facilidad. Pero ni Del Cerro Grande ni De Burgos Bengoetxea quisieron rearbitrar nada. Entró Messi y todo cambió.
A los dos minutos marcó. El Betis pasó del 2-0 al 1-1 en nada. Eso sí, muy mal la defensa que se olvidó de defender al único jugar del mundo del que hay que estar pendiente a cada momento. El argentino recibió en la frontal del área con el tiempo suficiente para colocarse y clavarla ajustada al palo imposible para cualquier mortal en el planeta tierra. Empate en el marcador y mucho partido por delante. El Betis era un flan. Todo el orden defensivo y la intensidad se fueron por los desagües del Villamarín. Nervios, errores en salida, jugadores del Barça que recibían solos, Messi jugando en el patio del colegio y encima la mala suerte. Jugada de tiramillas del Barça que acaba en pase de la muerte de Alba a Griezmann. El francés no remata inexplicablemente, pero el balón sale hacia atrás y rebota en Víctor Ruiz que llegaba a tapar y acaba entrando en propia portería. La jugada ya merecía el gol, pero no esa crueldad.
Con la remontada finiquitada, parecía que el partido había terminado. Pero este Barça fue un auténtico descontrol en defensa y el Betis seguía encontrando espacios con mucha facilidad. En una de esas, Fekir se marcha solo por banda y recibe la dura entrada por detrás de Busquets. Es el propio Fekir el que la pone como con un guante en el área y Víctor Ruiz se redime de su gol en propia para volver a poner las tablas con un testarazo inapelable. De nuevo empate y partido muy vivo, pues ambos equipos estaban muy desordenados y dejando muchos espacios.
Y encima entró Canales. El cántabro entró y revolucionó a su equipo. El Betis, ya sin el susto de la entrada de Messi, reaccionó y apunto estuvo de darle la vuelta al marcador. La primera que toca Canales es un pase a la espalda de la defensa que controla dentro del área y se la pone a Loren, pero Umtití se adelanta y la manda a corner. La segunda, un balón filtrado al marbellí que entre una cosa y la otra tarda en definir, pero Ter Stegen sale rápido para tapar y desbaratar la ocasión. El Betis lo tuvo en su mano y en su mano lo perdió.
En una jugada aislada del Barça, un balón muerto cae dentro del área y Victor Ruiz tarda un mundo en despejar. Se le adelanta Trincao para clavar un zurdazo que toca en el larguero y entra. El central pudo hacer más, quizás Joel también, pero el Barça aprovechó el regalo de la defensa para hacer daño y llevarse los tres puntos. El Betis lo intentó hasta el final, pero ya era muy complicado.
Termina la racha del Betis en este 2021 pero la buena imagen de los verdiblancos vuelve a marcar el camino a seguir. Compitió, pudo ganar y demostró que con esa actitud e ideas puede hacerlo con cualquiera.
