El Real Betis ha vivido una noticia positiva en el entrenamiento de este miércoles en la ciudad deportiva Luis del Sol. Víctor Camarasa ha vuelto a ejercitarse sobre el césped junto a sus compañeros tras no poder hacerlo desde agosto del año pasado. Una noticia que no merecía menos que las felicitaciones de sus compañeros, que se encontraban bromistas con él durante la sesión.
Es la luz al final de un largo túnel para el centrocampista, que se rompía el ligamento cruzado anterior de su rodilla derecha justo cuando el equipo se preparaba para su debut en la presente campaña frente al Alavés. «Me duele la rodilla pero más no poder ayudar al Betis. Se han confirmado las malas sensaciones que tuve entrenando y no podré jugar en unos meses. Volví para triunfar y esto no me lo impedirá, al contrario. Ahora toca animar desde fuera y volver aún más fuerte», dijo cuando se lesionó.
Ahora Camarasa, tras mucho trabajo y esfuerzo en solitario, afronta la recta final de la temporada con la ilusión de volver a hacer lo que más le gusta, disfrutar y jugar al fútbol y con la intención de poder tener, aunque sea, algún minuto en alguno de los cuatro partidos que quedan para el final de LaLiga. El técnico Manuel Pellegrini lo descartó para este curso, pero ha acortado plazos y su vuelta no sería de extrañar.
En la sesión de trabajo de hoy han sido ausentes Martín Montoya, que sufrió un problema de tobillo el sábado y no estará disponible para el partido del próximo lunes frente al conjunto nazarí, Lainez, con una pequeña lesión muscular, y Mandi, quien tampoco podrá estar frente al Granada tras recibir en Valladolid su quinta tarjeta amarilla de la temporada, al igual que el internacional francés Fekir.