Avanza el mercado de fichajes y con él, los movimientos. El Real Betis tiene varios refuerzos pendientes a expensas de un equilibrio económico que exige primero dar salidas a varios jugadores. Es en este sentido donde aparece William Carvalho. El luso está en la rampa de salida y la secretaría técnica trata de estudiar la mejor opción para todas las partes. Aquí aparece el Nottingham Forest, quien tiene marcado en rojo el nombre del futbolista en la lista de prioridades.
El recién ascendido inglés entabló hace unas semanas conversaciones con los verdiblancos para hacerse con Álex Moreno. Si bien, la oferta realizada no llegó a los seis millones de euros y fue rechazada de forma fulminante, muy lejos de los veinte millones de euros en los que el club ha tasado al catalán. Ahora, tal y como apunta el reputado periodista Fabrizio Romano, el Nottingham Forest ha centrado su interés en William Carvalho.
El jugador dispone de un año más de contrato con el Real Betis y, tras rechazar la oferta de renovación que el club le ha puesto sobre la mesa, su salida en este mercado cobra forma. Sus pretensiones económicas rondan los 3’5 millones de euros, siendo una cantidad bastante considerable y que el jugador no parece abandonar. Es esta razón, unida a su negativa a permanecer en el club lo que hace que se le busque un nuevo destino este verano. El Real Betis lo tasa en ocho millones de euros.
Clubes como el Galatasaray, el Fenerbache o el Monza, unido al posible trueque con Aouar hacia el Olympique de Lyon, le han pretendido. Como es lógico, el futbolista aguarda en busca de la mejor opción, aunque no descarta continuar el año restante y negociar un nuevo contrato a partir de enero de 2023. El futbolista está al borde de cumplir los 30 años y con toda la probabilidad el próximo será su último contrato. Por otro lado, lo cierto es que el Mundial está a la vuelta de la esquina y William deberá escoger la mejor opción para que no le afecte a su convocatoria con el combinado portugués.
La cuenta atrás para el mercado de fichajes está en marcha y el portugués tiene la llave de su futuro en sus manos. Cordón y su equipo técnico serán los encargados de encontrar una opción que satisfaga a todas las partes.