El partido de anoche en el Benito Villamarín ha sido vivido por ambas aficiones como un partido loco. Tanto verdiblancos como franjirrojos tuvieron muchas oportunidades de poder obtener la victoria en Sevilla, aunque al final terminaron llevándose el gato al agua el club verdiblanco. Los goles de Moreno y Juanmi fueron respondidos con un error del mismo lateral izquierdo que provocó el primer tanto de los de Iraola. En la segunda parte llegarían a empatar los visitantes aunque William José llegó a salvar la situación del Betis con un gol de penalti al final.
Para hablar mejor y más detallado de lo ocurrido en el encuentro, debemos dividir el partido en dos etapas: antes y después del 2-0. Nos fijaremos sobre todo en el pensamiento del equipo tras los dos goles que, a pesar del craso error de Alex Moreno, es el motivo por el cual llegaron a empatar. El técnico chileno sacaría un once de gala. Con la dupla Edgar-Bartra en el eje central y Bellerín y Moreno en bandas, formarían la zaga defensiva. En el centro del campo, Guido Rodríguez equilibrando al equipo y Canales a su lado para poseer más talento por el círculo central. En línea de mediapuntas, Rodri, Juanmi y Fekir eran los encargados de apoyar a William José en ataque y cumplieron con nota.
Al inicio del encuentro se veía al típico Betis de esta temporada, dominante con balón, fluido en ataque y donde no titubeaban al atacar y llegar a portería. El Rayo intentaba buscar los errores al equipo verdiblanco, pero el centro del campo estaba muy bien colocado en el césped dejando casi inútil el juego de los rayistas. Llegaban oportunidades de todos los lados hasta que empezaron a aparecer los goles. Una tormenta aparecía en la portería de Dimitrievski, donde se vio en un contexto muy desfavorable e incluso pudo entrar algún gol más. A partir de aquí, cambia todo.
Después de esos minutos donde el Betis alcanzaba su máximo, comenzarían a desinflarse y a dar más juego a un Rayo que aprovechó un regalo inusual en Primera División. Un pase de Alex Moreno sin mirar directo a la portería terminó siendo una «asistencia» a Trejo, que se encontraba pegado a la portería. Errores así son ilegales en cualquier élite. A partir de ahí, y con la confianza que el Rayo recibió, las cosas se torcerían. Salvo algún destello y la muestra de que, aun heridos, pueden hacer daño, el Betis sufriría en buena parte del encuentro.
La segunda parte estaría caracterizada por los errores del equipo que propiciaban el 2-2 por parte de Álvaro García. El equipo se mostraba algo conservador, intentando mantenerse ante los ataques de los madrileños, intentando achicar agua en un momento en el que el Betis pudo llegar a perder un partido que tenían prácticamente ganado. Pero pese a ello, el Betis se supuso recomponer y con el plan realizado para el encuentro volvieron a mantenerle el pulso a los rivales. Para alegría de los béticos, el gol de William José vendría como agua bendita. En el siguiente cuarto de hora disputarían el encuentro con mucha garra ambos.
A destacar tres nombres: Moreno, Juanmi y Guido. El argentino, en su línea. Activo saltando en su zona para robar o anticiparse al pase y mostrando esa solidez defensiva del que presume. Por parte del lateral izquierdo, que su error no manche del todo su rendimiento en Heliópolis ayer. Mostró ser un puñal en sus mejores momentos, donde su velocidad y su capacidad para desbordar pueden dejar a los suyos en una posición muy ventajosa. Bendito quebradero de cabeza para Pellegrini a la hora de elegir ese puesto en cada partido. Y del malagueño, mostrar su evolución. Confianza espectacular en sí mismo, donde se encuentra cada vez más acertado en sus acciones y cuyos aspectos técnicos van mejorando poco a poco. Brutal mejora la del malagueño.
El equipo sufrió pero supo hacerlo y pudo superarlo. Aguantó las estocadas del equipo rival y comenzaron a mejorar a pesar del error. Próximo partido: Valencia. Equipo intenso con la nueva cara en el banquillo de Bordalás que nunca nos deja indiferente cuando jugamos ante él. Muy buenas sensaciones por parte de los verdiblancos, muy lejos se ve el techo de evolución de esta plantilla.