En día de Oscar tanto Betis Féminas como Granadilla se quedaron sin su estatuilla particular. El premio del gol se le volvió a resistir a las de Amorós por sexto partido consecutivo. Y aunque ambos tuvieron opciones en la segunda mitad finalmente sumaron un punto que no les vale para prácticamente nada.
A ninguno de los dos equipos le salieron las cosas en la primera parte. Poca precisión en el último pase , falta de desborde y nulo acierto en el remate fueron las principales definiciones de una primera mitad donde las porteras no tuvieron que intervenir. El balón parado era la única forma que encontraban ambos equipos para crear peligro. Dorine y Cubedo tuvieron las más claras para sus respectivos equipos pero sendos cabezazos se fueron desviados.
El Betis salió con más mordiente a la segunda parte lo que despertó al Granadilla. Las béticas seguían intentándolo a balón parado mientras que las locales buscaban aprovechar la velocidad de Martín Prieto. La sevillana era la jugadora que más peligro estaba creando pero Dorine supo igualar el duelo físico. Los entrenadores empezaron a mover los banquillos buscando más desborde. Y el partido entró en diez minutos de locura.
Las ocasiones que no habían llegado en todo el partido empezaron a sucederse pero con las porteras erigiéndose como salvadoras. La más clara paras las verdiblancas llegó de las botas de Sosa con un potente disparo cruzado que despejó Noelia Ramos. En la jugada posterior llegó la respuesta de las tinerfeñas. Tras un pase atrás de Nasello, María José se quedo con toda la portería a su favor para conseguir el primero pero Thalmann en una exhibición de reflejos consiguió desviar el disparo a córner.
Pero a quince minutos del final, el Betis Féminas se desinfló. La lesión de Mari Paz dejó tocadas a las verdiblancas que no fueron capaces de salir de su campo ante un Granadilla que cada vez apretaba más. A pesar de todo las de Amorós supieron resistir y llevarse un punto que pudo ser ninguno en el último suspiro. Natalia Ramos tuvo la oportunidad de darle a su equipo los tres punto con un lanzamiento de falta pero que Thalmann salvó milagrosamente.