El Atlético de Madrid del Cholo Simeone es un equipo duro, intenso, trabajado y con la idea de su fútbol muy clara. Partiendo desde el 4-4-2 con un pivote, un interior a su lado, un jugador trabajador en banda y un extremo más vertical, los del Cholo son un equipo muy sólido que destaca por ser compacto durante los 90´.
Con balón es un equipo que propone un plan muy dinámico: juntar jugadores por dentro (Saúl, Koke, Joao, Carrasco…) para romper por fuera con Lodi + Trippier y girar a la defensa con la intención de centrar al área. Busca cargar la zona de remate con los interiores, los puntas, el extremo del lado contrario… intenta finalizar jugada. No obstante, lo cierto es que viene siendo un equipo espeso, lento en circulación y previsible. El ataque posicional del Atleti no termina de funcionar.
Es un conjunto que si logra llevar a cabo su plan de partido en campo contrario mediante ataques posicionales, consigue presionar tras pérdida con mucha intensidad. Es un equipo preparado físicamente para presionar durante todo el encuentro. Aún así, no le importa esperar a su rival: defender en parado, dominar su área, hacerse fuerte con Felipe + Giménez en área propia para contragolpear con espacios.
A nivel individual, el equipo rojiblanco es muy complicado de parar. Joao Félix tiene una magia especial, Koke generando, Carrasco rompiendo en velocidad a su marca, Luis Suárez enchufando cada balón en portería rival, Jan Oblak siendo diferencial bajo palos, Felipe en área propia… un sinfín de nombres de nivel top.
El Atlético del Cholo es un conjunto que domina, a diferentes niveles, la mayoría de fases del juego: el ataque posicional, las transiciones, la defensa posicional, la presión en campo contrario… y que además tiene piezas diferenciales que pueden cambiar el devenir del partido.