Funcionó todo, con una -por fin- plantilla de 12, con el debut de Boris Dallo y el regreso de Sasha Cvetkovic. El faro, el de casi siempre: Mark Hughes. El anotador estadounidense firmó una cartilla estadística de 29 puntos (6/8 en triples) que catapultó a los suyos a un triunfo valiosísimo en una complicada cancha como es el Plantío. Labrada, eso sí, desde una defensa asfixiante: se dejó a un talentoso equipo en veinte puntos menos que su media. Burgos pareció pequeño, y también el exbético Pacheco, a quien la defensa verdiblanca contuvo a pesar de sus 12 asistencias. Los de Gonzalo García suman una nueva victoria, en forma de recital, y piensan ya en el Estudiantes.
Inicio de ensueño y debut de Dallo
La ejecución bética al inicio fue, seguramente, tal y como habría soñado Gonzalo García de Vitoria. 0-10 de inicio con un Hughes enchufadísimo y cerrando todas las vías anotadoras de Tizona. Un equipo que suele destacar por su virtuosismo ofensivo tardó algo más de tres minutos en abrir la lata. Lo consiguieron por la vía del rebote ofensivo y recobraron sensaciones antes de que Hughes volviese a la carga (14 puntos en el cuarto). Entre tanto, volvió Cvetkovic para dar un respiro a Benite y se estrenó Boris Dallo, el recién llegado. Simeunovic tiró de orgullo para achicar, y dejar el marcador en 16-25 al cierre del primer capítulo.
Cuando pudo correr, Tizona hizo el 22-30 y lo paró Gonzalo García, tras tres anotaciones de los burgaleses sin respuesta de los suyos. Benite y Hughes hicieron el +13 y el duelo entró en una dinámica de intercambio de golpes preciosa para el espectador. Como viene siendo habitual, el pick and roll Renfroe-DeBisschop abrió huecos en la defensa burgalesa y volvió el +13 visitante; Salva Camps tuvo que pedir tiempo muerto. Parrado animó al Plantío con un par de triples, pero su inspiración tiradora no fue suficiente. El Betis lideraba al descanso 37-46, con una imagen de férrea solidez ante todo un crucero ofensivo como es Tizona.
Tizona vio un espejismo en el Plantío
La defensa burgalesa mejoró tras el intermedio y también lo hizo el ataque. El Betis, espeso, se conformó con una canasta de Radoncic tras rebote ofensivo. Más tarde Hughes iría a la línea, algo después de sacarle la cuarta falta a Thiam. Entró por él Keita, y DeBisschop le sacó la tercera. Tizona se veía en partido, mostrando una versión más competitiva que la de la primera parte. El Betis seguía arriba, pero cada vez por menos, viendo la sombra del rival alargándose en el callejón. Una falta en rebote tras triple de Benite hizo el 51-63, en un ritmo más lento y con menos puntos, pero igualmente intenso. Un nuevo triple de Hughes (4/6 para 23 puntos) y Tunde bajo el aro hicieron el +15 bético tras tres cuartos, 53-68.
Buenos minutos de Rubén López, un triplazo insólito de Hughes y un buen esfuerzo de Tunde daban el +24 al Betis; algunos asientos en el Plantío empezaban a vaciarse a cinco minutos del final. El monólogo bético terminaba como empezó, asfixiando a los rivales en defensa y con una correcta fluidez ofensiva. Tizona pareció un equipo mucho más pequeño de lo que es al lado del prime del Betis en el que todos aportaron. El debut de Dallo se saldó sin puntos (el único, en el Betis, junto a Jelinek), pero durante su tiempo en cancha mostró su intensidad física y su habilidad para proteger el balón. El recital verdiblanco en el Plantío sirve como trampolín a un Betis que no deja de mirar hacia arriba, y su próximo compromiso tiene tintes de revancha: Estudiantes volverá a visitar San Pablo.
Ficha técnica
Tizona Burgos – 69 (16+21+16+16): Pacheco (3), Jones (6), Seoane (0), Simeunovic (16), Keita (6) -quinteto titular-, Rodríguez (1), Lobo (3), Soluade (9), Parrado (14), Vila (0), Thiam (6) y Díaz (5).
Real Betis Baloncesto – 91 (25+21+22+23): Renfroe (5), Benite (16), Hughes (29), Suárez (6), DeBisschop (7) -quinteto titular-, Cvetkovic (2), Dallo (0), Jelinek (0), López de la Torre (4), Tunde (9) y Kasibabu (3).