Pocas horas quedan para que vuelva a rodar el balón por el Benito Villamarín en una noche de gala. El Ferencváros vuelve a jugar ante el Real Betis en la quinta jornada de Europa League para buscar la única victoria que puedan contar en Europa en esta campaña. Los béticos disputarán un partido que, de no ser por resultados anteriores (empate y derrota ante el Bayer), podría haber resultado más fácil de sobrellevar.
Con la baja de Sigér en el cuadro húngaro, los de Peter Stöger podrán utilizar todas sus armas de cara a este encuentro. Situación nada similar para los verdiblancos que tendrán que lidiar con las bajas de Montoya, William Carvalho, Fekir y Rodri.
Si algo no ha cambiado en Budapest es el argumento de ellos, de ser un equipo luchador hasta el final. La muestra fue su última actuación europea ante el Celtic (2-3), donde estuvo poniendo contra las cuerdas al equipo escocés, que estaba cuajando un gran encuentro. Siempre buscan a los delanteros más móviles o en caso de tener a un referencia, el desmarque del mismo para jugar de una manera muy sencilla y directa. A pesar de que el rival tenga una idea de juego totalmente distinta, los de Stöger mantienen su plan todo el partido. Y en algunos encuentros, casi les llega a funcionar.
Como ya vimos en el Groupama Stadium, el equipo húngaro no escatimará en defender lo necesario por llevarse un buen punto de recuerdo en la temporada. Hay que tener mucho cuidado si surge un contragolpe de ellos y no tenemos un gran ritmo de repliegue y buena colocación. La vuelta de Guido Rodríguez a la convocatoria será una alegría importantísima para Pellegrini, al ver que uno de sus pilares ha vuelto. Su reincorporación al equipo será crucial para intentar contener cualquier respuesta de los rivales. A pesar de ello, no será difícil -en teoría- dominar en el campo. Si podemos transformar esa posesión en ofensivas peligrosas, no se dudará de que el equipo sevillano pueda conseguir esos tres puntos. Recordemos que llevan un promedio de 2,5 goles encajados por partido, por lo que bastará con afinar la puntería para sacar petróleo.
Encuentro más difícil de lo que se prevé por el contexto más que por el rival. Saltar al campo sin tener mucha presión será lo más importante para los locales. Si se llega a ganar este encuentro, se reforzaría la posibilidad de entrar a la siguiente ronda en Europa League. Todo depende de un gran obstáculo: el Celtic, pero eso es otro cantar.