Con el mercado de traspasos todavía sin comenzar, el Real Betis tiene la fecha del 30 de junio marcada en rojo en el calendario. Ese día deberá presentar un balance de cuentas equilibrado, y actualmente cuenta con un desfase de 25 millones de euros en negativo.
La manera más rápida de cuadrar dicho desfase es vendiendo jugadores. La plantilla del Real Betis se ha revalorizado esta temporada gracias al título de Copa del Rey y a una segunda clasificación europea. El rendimiento deportivo trae de la mano prosperidad económica, y una temporada con resultados hace que los clubes se interesen en los jugadores del Real Betis. Vender es sinónimo de crecimiento, y el Betis acumula varios mercados de traspasos sin ingresar nada.
Es por ello que el club verdiblanco necesita sí o sí cuadrar ese desfase de 25 millones antes del 30 de junio, si no quiere enfrentarse a severos castigos financieros por parte de LaLiga, siempre y cuando no haya otro aplazamiento, como ocurriera la temporada pasada por la pandemia al llegarse a un acuerdo entre clubes y Tebas. Mientras eso no sea oficial, el Real Betis sigue necesitando imperiosamente ingresar dinero y vendiendo futbolistas es lo más rápido y factible, lejos de acuerdos de patrocinios millonarios a los que los verdiblancos todavía no aspiran.
Esta situación es por todos sabida. Ángel Haro y Antonio Cordón lo han remarcado en varias ocasiones con el fin de tranquilizar a una afición deseosa de grandes fichajes, operaciones y caras nuevas en la plantilla. Pero la realidad es muy diferente. El Real Betis solo se ha gastado apenas 11’5 millones de euros en dos fichajes desde que llegara Cordón (Pezzella y Willian José, al efectuarse su opción de compra obligatoria) y a la espera de oficializarse la llegada de Luiz Henrique. Tanto presidente como director deportivo quieren calmar las aguas y él «ningún jugador es intrasferible» de Cordón es toda una declaración de intenciones.
¿Pero beneficia esta postura tan transparente al Betis? Eso queda para el debate popular. La realidad es que las pocas ofertas que han llegado a las oficinas del club son totalmente insuficientes para los verdiblancos. Irrisorias ofertas por Guido, por Alex Moreno y por William Carvalho. El Betis espera cerrar alguna o algunas operaciones antes del final de mes, pues su intención es no malvender a ninguno de sus jugadores, capitales para Manuel Pellegrini.
La pregunta es si logrará hacerlo. El tiempo corre en su contra y los clubes lo saben. El Betis tiene ciera prisa y hay calma tensa por Heliópolis. ¿Logrará acuerdos satisfactorios para las arcas verdiblancas o se acabará marchando alguna estrella a precio de saldo?