La superioridad y la diferencia de calidad entre Real Betis y Jagiellonia fue más que suficientes para que los de Pellegrini pasaran por encima del conjunto polaco casi sin despeinarse. El resultado se antoja corto para lo que podría haber sido, pero la sensación de que el equipo se reservó pensando en el duelo ante el Villarreal del próximo domingo estaba ahí.
Algo debe tener el Jagiellonia para estar en cuartos de final de un torneo europeo, pero lo que mostró en el verde de Heliópolis fue muy poco. Un equipo que al menos propone juego, quiere salir tocando la pelota y no es torpe en la posesión, pero no dejó de ser un muñeco quizás algo acomplejado ante los 56.000 espectadores del Villamarín y con miedo a no llevarse un saco de goles a casa. En eso les salió bien.
El Betis tuvo la posesión, pero con calma. Solo las incursiones de Jesús Rodríguez aumentaron el ritmo, pero las intenciones de los verdiblancos eran las de ganar pero con poco. En eso el reflejo fue Antony, cuya calidad que atesora parece que se la reserva y no quiere abusar, o no quiere desgastarse. Ayer apenas dejó un par de pases de auténtica maravilla, pero está muy lejos de la portería.
El primer gol llegaría rondando la media hora de partido, y tuvo que ser a la contra aprovechando el Betis un despiste de la defensa y muchos huecos en el Jagiellonia que se atrevió a ser valiente. El pase filtrado de Fornals, que ayer fue dueño y señor del centro del campo, deja solo a Bakambu en el mano a mano y no falla para anotar su sexto gol en la Conference esta temporada.
El Villamarín fue una fiesta durante todo el partido y mucho más tras el segundo, justo antes del descanso. Una jugada entre Jesús Rodríguez y Bakambu la aprovecha el de Alcalá cuando le cae la pelota muerta dentro del área y batir al portero, anotando su primer gol en Europa esta temporada. El tanto tuvo misterio, pues el VAR tuvo que revisar la dudosa posición del delantero congoleño previo al gol del canterano.
Con 2-0 se iba el partido al descanso y las sensaciones en la grada del Villamarín eran las de aprovechar la superioridad y dejar ventilada la eliminatoria. Pero el Betis se relajó y los cambios de Lo Celso y Bartra dejaban a las claras que Pellegrini ya pensaba en el domingo. El Jagiellonia llegaría a marcar en una jugada lateral que acaba en centro al área, pero fue invalidada por fuera de juego. El susto estaba en el cuerpo. El Betis incluso pudo doblar su ventaja, pero se topó con el palo hasta en dos ocasiones. Un disparo de Jesús Rodríguez que buscó el doblete antes de ser sustituido; y un cabezazo de Natan al remate de un córner. El Chimy Ávila, Altimira y Aitor Ruibal completaron los cambios y el Betis perdió esa magia en el juego. Solo Lo Celso tenía futbol en sus botas y le faltaban acompañantes, algo que el equipo notó en la segunda parte.
Aun así, el Betis deja muy encarrilada la eliminatoria y deja la sensación de que en Polonia no será tan sencillo, pero le dará para marcar goles y no pasar muchos apuros. La vuelta será el Jueves Santo a las 18:45 de la tarde, pero antes, el duelo de Champions ante el Villarreal CF el próximo domingo.
