El Villarreal CF de Unai Emery es un equipo propositivo, alegre, que tiene futbolistas con un gran trato de balón y capaces de monopolizar la posesión de balón con facilidad. Partiendo desde el 4-3-3, Emery ha encontrado el equilibrio utilizando dos laterales ofensivos, un pivote posicional (Iborra) acompañado de dos interiores con un buen pie (Trigueros + Parejo) y una línea de tres atacantes con dos extremos que pisan pasillo interior (Gerard + Moi) junto a un punta que fija y atrae centrales (Alcácer).
En fase ofensiva, los de Unai son un equipo con una salida de balón automatizada. Genera superioridades en salida con facilidad y transita de forma vertical tras encontrar la vía de escape. Posee dos centrales de altísima calidad para poder salir (Pau Torres + Albiol). Conducen, dividen, atraen presiones, juegan en largo… son la principal baza para superar presiones. Asimismo, mediante sus dos laterales, el submarino amarillo otorga a su juego un punto incisivo y vertical. Sale desde atrás, junta pases, monopoliza posesión, pero también sabe atacar los espacios y generar peligro en esas situaciones.
Sin balón, buscan la presión alta. Ir a presionar para robar y volver a ser el protagonista del partido. En ataque posicional, cuando pierden el esférico, presionan tras pérdida de forma coordinada e intensa, provocando la recuperación e imposibilitando la transición de su rival. Con Iborra en el pivote abarcando metros y ofreciéndole trabajo al equipo, los de Emery han encontrado el equilibrio.
Será un partido complicado para los de Pellegrini, que se enfrentan a un rival controlador de muchos registros del juego. Sale desde atrás, monopoliza la posesión, te presiona con eficacia, viene en dinámica positiva… un rival de alto nivel.