Ruibal volvía al once de Pellegrini como titular ante el Villarreal, y no defraudó. El canterano marcó uno de los goles de la temporada hasta el momento con un increíble disparo para empalar un balón aéreo directo al fondo de las mallas defendidas por Sergio Asenjo: «Me ha venido… Le pegué con todo para que entrara. Por suerte, el balón entró. Se lo dedico a mi novia. Llevaba mucho tiempo sin marcar. Se lo dedico a ella por estar día a día conmigo«
«El punto sabe a poco. Hemos tenido nuestras oportunidades. Nos marcaron nada más empezar a balón parado. El equipo ha competido muy bien. Es lo mínimo que se nos puede pedir. El encuentro ha sido parejo«, dijo el atacante verdiblanco frente a los micrófonos.
Por otro lado, también hubo tiempo para hablar sobre la fragilidad defensiva y el otro gol del día de hoy, el del Villarreal: «Tenemos que mejorar los primeros minutos. Hemos recibido muchos goles así. A veces es falta de concentración, no sé; el rival también juega. Un punto al final ante el Villarreal es un buen punto«, añadió.
La celebración del canterano no estuvo dedicada exclusivamente a su novia, como comentó a los medios al finalizar el encuentro, sino también a Toni Doblas. El preparador de porteros del club y mítico jugador del Betis perdió hace unos días a su padre y Aitor Ruibal se acordó de él tras anotar su particular golazo.