No pudo el Betis ante tanta traba en el camino. La expulsión de Fekir en el minuto 10 de partido lastró todos los plantes posibles de los verdiblancos, que habían salido adormilados al partido y la presión alta de un Athletic en cuadro por las bajas le sobrepasó. Y lo acabó pagando demasiado caro.
El punto tiene sabor agridulce: bien por las circunstancias del partido, por haber estado en inferioridad durante 85 minutos; pero mal por ser el cuarto empate consecutivo, nuevo frenazo en los puntos pero que puede valer y mucho al final de la temporada. El Betis sigue sobreviviendo, y eso siempre es una buena noticia.
Y eso que las llegó a tener. Tuvo fases del partido en las que el Betis se atrevió a tener la pelota, a tocar y a llegar cerca del área de Unai Simón, pero las mejores siempre fueron saliendo desde atrás y aprovechando los espacios que dejaba un Athletic que no quería perder la oportunidad de ganar. Aitor Ruibal y Guido fueron los mejores, o los únicos según se mire, del Betis en la primera parte. El resto se vieron demasiado superados por encontrarse con uno menos y más afanados en achicar agua. Tello lo intentaba con jugadas verticales a cuenta gotas. En una sacó un falta de De Marcos que no quedó en eso; en la segunda si vio la amarilla. Igualito que a Fekir. Claudio Bravo fue otro de los que mejor estuvo. Aportando seguridad en defensa, en los balones por alto y atento en los pocos pero peligrosos disparos desde lejos del Athletic, que llegaba con relativa facilidad, encontraba huecos –sobre todo por la banda de Tello y Miranda- pero no se encontraba de cara a gol. Y menos mal.
El cero a cero era la mejor noticia para el Betis tras el descanso. El partido se abrió más y por ende el Betis aprovechó para igualar un poco las fuerzas y generar algo de peligro. Aitor Ruibal seguía siendo el más activo en la recuperación y en ataque. Él solo se inventó una jugada desde mediocampo, sorteando rivales y que culminó en un tiro bastante defectuoso, pero que demostraba ser el único junto a Canales que rompía líneas. El Betis llegó a encontrarse con el gol. De Mandi tras intento de disparo de Guido que rebotó en De Marcos y Mandi rebañó en área pequeña. El juez de línea levantó la bandera y la repetición del VAR todavía no es clarividente. Imposible verlo, por lo milimétrico de la jugada y por estar Bartra justo delante de los implicados. El VAR no quiso complicarse y lo anuló.
Pero el paso de los minutos empezó a sentar peor al Betis. La gasolina se fue acabando y el Athletic se mostró más entero en la superioridad. Claudio Bravo se erigió como salvador sacando dos paradas casi continuas a sendos disparos lejanos de Unai y Raúl García, que había entrado en la segunda parte junto a Ibai e Iñaki Williams. Con todo iba y Marcelino, pero se estrellaba contra una defensa que fue creciendo de menos a más. Aun así, el partido terminó en área del Athletic, con una falta botada en el último minuto y que Lainez empaló en área pequeña y encontrándose con la manopla de Unai Simón evitando el postrero gol.
El Betis saca un punto de la desgracia del partido, que sabe a muy poco viendo como llegaban ambos equipos, pero que es de oro viendo las circunstancias. Los verdiblancos cerrarán su Tourmalet particular ante el Real Madrid el próximo sábado y con el objetivo de seguir invictos.