El Real Betis ha puesto punto y final a una temporada que ha supuesto un giro de 180 grados respecto a la anterior. Esta 2020/21 no tiene nada que ver con la pasada campaña. Lo único parecido es la plantilla, que solo ha sufrido apenas cuatro o cinco cambios con las llegadas de Montoya, Claudio Bravo y Miranda, así como Aitor Ruibal que estaba cedido en el Leganés. Sin dud, el gran cambio ha sido en el banquillo.
Manuel Pellegrini es el gran artífice de la clasificación europea de un Betis abocado a salvar los muebles en una temporada de transición y con los problemas económicos por la crisis del Covid19 y que ha acabado superando todas las expectativas. Los verdiblancos han logrado una de las mejores clasificaciones del s.XXI y vuelve por la puerta grande a Europa y que se ha convertido en el equipo de LaLiga que más ha mejorado con respecto a la anterior temporada. Un total de 20 puntos más ha logrado este Betis de Pellegrini que el de Rubi y Alexis de la pasada temporada.
El Betis ha pasado de sumar 41 puntos en las 38 jornadas del pasado curso a los 61 de la presente con el chileno en el banquillo. Ha cambiado la sexta plaza por abajo a la sexta por arriba. Un cambio radical que tiene un nombre propio: Manuel Pellegrini. Capaz de lavarle la cara a un equipo que compitió hace un año por debajo de sus posibilidades, que se devaluó peligrosamente y que ha vuelto a la vida gracias a El Ingeniero.