El Real Betis ha comenzado la pretemporada solo con una cara nueva, la de Youssouf Sabaly como recambio de Emerson. Las otras dos incorporaciones, Miranda y Rui Silva, se encuentra de vacaciones tras la Eurocopa en caso del portugués, y con la Selección Española sub23 para los JJOO de Tokyo en el caso del de Olivares.
De momento la llegada de un central que supla la baja de Aissa Mandi se encuentra en punto muerto. Uno de los objetivos, Fabian Balbuena, ha firmado con el Dinamo de Moscú, donde cobrará mucho más que lo que le ofrecía el Betis. El paraguayo, una vez finiquitada su presencia en la Copa América, ha cerrado su futuro tras terminar contrato en el West Ham.
Los otros nombres sobre la mesa del Betis son Daniele Rugani, de la Juventus. El italiano no quiere seguir saliendo en calidad de cedido y quiere estabilizar su carrera. Desde Italia se hablaba de negociaciones entre clubes, pero las dificultades económicas del Betis para cuadrar sueldos en el límite salaria lo hacen casi imposible si no se cierra alguna salida en los próximos días. De igual manera con Mussachi o Luiz Felipe, los otros dos nombres en la mesa de Antonio Cordón.
Un Antonio Cordón que ya ha dejado claro que «si no llega ningún central, en la cantera hay jugadores válidos para el primer equipo», toda una declaración de intenciones de cara a un mercado que no parece vaya a distar mucho del pasado, donde los verdiblancos se gastaron la friolera de cero euros en traspasos. Si no hay salidas, no habrá entradas, pero en el Beti esperan que este mercado sirva para ingresar algo en las arcas verdiblancas con los descartes de Pellegrini