Manos a la obra. El Real Betis 2.0 de Manuel Pellegrini echó a andar. Sin todos sus efectivos, a falta de incorporar a los últimos miembros al equipo de trabajo y con los secuelas habituales de un verano tan corto como caluroso, el conjunto de las trece barras aterrizaba en Mallorca con el objetivo de comenzar, de la mejor manera, la construcción de la nueva obra del Ingeniero: el EuroBetis. Pero como el presupuesto del equipo de la Palmera no abunda, el técnico chileno tuvo que hacer uso de los jóvenes alumnos predilectos para complementar un equipo plagado de veteranía. Y de algunos descartes, todo sea dicho. Pero como todo buen trabajo, hacen falta varias semanas de rodaje para poner la maquinaria a punto, y la nueva construcción verdiblanca no iba a ser menos. Las manías y errores del primer plan de Manuel Pellegrini acompañaron al cuadro bético en un partido más propio de la 2020/2021 que del nuevo curso. Pero esto no ha hecho más que empezar.
La savia nueva, la nueva generación de obreros que se presentó en Son Moix para comenzar el trabajo de edificación verdiblanco, fue lo más destacado del encuentro. Las comparaciones suelen ser odiosas, y más cuando tu homólogo es un tal Guido Rodríguez. Pero en este caso, Paul Akouokou demostró que tiene las condiciones para ser un peón importante en los trabajos de fuerza de Manuel Pellegrini. Así mismo, aunque sin mostrar toda la brillantez que sus botas atesoran, Rodri Sánchez dejó pequeños esbozos del que puede ser su papel en el curso que recién arranque. Los canteranos, saco en el que también entran José Calderón o Rober González, son el nuevo material a estrenar por el Ingeniero. Con buenas refuerzas pero de (todavía) desconocido rendimiento en la élite, el chileno pondrá a prueba a los integrantes más jóvenes de su equipo en las primeras semanas de trabajo. De igual manera que los más novatos estuvieron a la altura con el paso de los minutos, hay jugadores que sí se vieron del todo sobrepasados en el estreno liguero por los obstáculos mallorquinistas.
El problema del Real Betis es que hay trabajadores, varios con un pie más fuera que dentro del proyecto de Manuel Pellegrini, los cuales tendrán una importancia capital en las primeras semanas de planificación bética. En el caso de Martín Montoya y Álex Moreno, herramientas tan utilizadas como conocidas por el jefe de obras, volvieron a pecar de los mismos errores por los que tantas veces ha alzado la voz el beticismo. Y es que la desorganización defensiva, problema número uno del Real Betis 1.0, sigue presente en el nuevo plan bético. Eso, y reaccionar cuando apenas hay margen de maniobra. El «no dejes para mañana lo que puedas hacer hoy» del Real Betis se acerca más al «no dejes para los últimos 15 minutos lo que puedes hacer durante los primeros 45». El Real Betis supo el curso pasado trabajar bajo presión, presentando los trabajos justo antes de la fecha de entrega, pero habrá ocasiones en las que no siempre salga adelante. Por ejemplo, ante el RCD Mallorca, contra quien se perdieron los dos primeros puntos del recién estrenado plan del Ingeniero.