José Miguel López Catalán ha vuelto a escena después de varias semanas sin tener noticias del él. El vicepresidente y consejero del Real Betis no ha dejado de estar bajo el foco y desgastarse de una forma destacada. Tras dicho tiempo apartado de los micrófonos y las cámaras, ahora ha roto su silencio para aclarar numerosas cuestiones en una entrevista concedida a AFDLP.
Catalán ha aprovechado la oportunidad para quitarse la presión y la responsabilidad, sobre todo en el apartado de la planificación deportiva, en la que asegura no tener ningún tipo de mando único desde la salida de Serra Ferrer: «Tengo que decir que de ninguna manera he sido, ni soy ni quiero ser el director deportivo del Betis. Eso es una mentira repetida mil veces que hay algunos que quieren convertirla en una verdad. Eso es absolutamente falso. La decisión de todo eso está en el área deportiva y tanto Haro como yo en la comisión deportiva y en el consejo y lo único que queremos, obligamos a hacer y supervisamos es que haya un proceso profesional».
Otro de los temas calientes en la entrevista ha sido su opinión al respecto de Serra Ferrer. La polémica con el de Sa Pobla comenzó desde su salida del club, con los famosos siete folios y el cambio por el Big Data. Catalán se defiende: «Me he sentido muy señalado y muy atacado por una parte muy importante de los medios, de la afición por supuesto, que recibe esos inputs, y he sido injustamente señalado. Aceptamos todas las críticas que haga falta, pero no las mentiras, y las malintencionadas, tampoco. Y todo este año desde la salida de Lorenzo se quiso apuntar que yo era la persona que había echado a Lorenzo del club para ser yo el director deportivo. Es absolutamente falso. Creo que la explicación de la salida de Lorenzo está más que dada y a las pruebas me remito de que el Betis necesitaba y necesita un director deportivo profesional«.
«El Betis no es que lleve ahora un año sin director deportivo, sino que lleva tres años sin director deportivo profesional, porque Lorenzo Serra Ferrer no es un director deportivo profesional. Lorenzo Serra Ferrer fue un gran entrenador en el Betis, el director de cantera en el Barcelona, pero no ha sido director profesional en un club y la única vez que lo ha intentado ser o lo ha ejercido ha sido en el Mallorca con los resultados que se dieron».
«Era vicepresidente deportivo y queríamos que hubiera este tipo de persona y por eso yo precisamente fui a buscarle y nos pareció una buena incorporación como vicepresidente deportivo. Y una vez trabajando con él tenemos constancia de que las funciones de un director deportivo profesional no las sabe desempeñar. Y con él simplemente abrimos un diálogo constructivo sobre cómo tenemos que dar un paso adelante en el fichaje de un director deportivo profesional y que él se quedara en el consejo como vicepresidente deportivo. Lorenzo no se lo tomó bien pero no sólo no se lo tomó bien, sino que decidió atacarme a mí, buscar ese ángulo contra mí y bueno a eso se sumaron muchos otros y llegaron a esa mentira para repetirla mil veces para convertirla en una verdad».
Polémicas aparte, Catalán también ha tenido palabras para valorar la temporada ya terminada, sus sensaciones tras el fracaso de Rubi: «Seguimos teniendo un poquito de frustración, dolor, por el fracaso deportivo de esta temporada. Al final es una temporada que ha sido dura y que no ha salido bien en el plano deportivo y eso lo tenemos aún un poco dentro. Pero se mezcla con la ilusión y la satisfacción de ver que este trabajo que estamos ya haciendo desde hace varios meses para construir este nuevo proyecto y para que al final corrijamos todas estas cosas que han ido mal. Llega el momento en que sólo podemos trabajar, trabajar, trabajar y esto da resultados con esta estructura deportiva, que pensamos que nos va a llevar a buen puerto. Lo que queremos es que el Betis vaya bien, que los béticos sean felices y es nuestra primera intención, pero al final realmente este año ha salido mal, ha sido un año malo y tenemos que pedir disculpas a los béticos».
En este aspecto, Catalán habla sobre las causas y motivos del fracaso de temporada: «Hay un fallo de entrenador, de los futbolistas o del área deportiva. Culpables somos todos. Ángel, yo y el consejo somos los primeros responsables de que esto no haya funcionado. Y después lo profesionales que juegan y plantean partidos. No ha funcionado. Tenemos que compartir bien las responsabilidades. Y en el caso del consejo, Ángel y yo si no funciona la estructura somos los responsables. Muchas carencias no son de este año, las teníamos los años anteriores. A veces se esconden porque el entrenador lo hace bien o porque unos jugadores lo hacen magníficamente o el apoyo de la afición, pero el Betis es un club que todavía para crecer tiene que seguir estructurándose y seguir desarrollándose y al final esas carencias han salido a la luz y hemos fallado en la estructura deportiva».
«El entrenador claramente no ha funcionado, no ha conseguido hacerse con el equipo y no ha dado resultado a pesar de su gran trabajo. En muchos casos ha habido un rendimiento muy por debajo de lo esperado y todo se suma. También es verdad que el Betis es club muy complicado y si las cosas se tuercen se complican mucho más. Aquí las dinámicas positivas te llevan adelante y las negativas te meten una mochila detrás que a veces es muy complejo por todo lo que hay alrededor del club, por todas esas ganas e ilusión de que Betis sea grande y estemos todos los años en Europa y dándole alegrías a la afición. En resumen, un año muy malo deportivamente».
