Los de Pellegrini han terminado la primera vuelta con muy buena dinámica. Además, siguen vivos en los octavos de Copa del Rey, eliminatoria que no logró alcanzar el año pasado con Rubi al perder con el Rayo Vallecano.
La temporada pasada fue un desastre para el Real Betis, quedando en el puesto decimoquinto cuando el objetivo era meterse en puestos europeos. El estilo de juego del curso pasado fue muy cuestionado por los aficionados, y no les faltaba razón, ya que los resultados respaldan esas cuestiones.
En pasada temporada el Betis disputó 41 partidos entre LaLiga y Copa del Rey. De estos, tan solo obtuvo el número de 12 victorias. Lo nefasto de este dato se corrobora con los números actuales. El Betis ha ganado 11 partidos de 22 disputados, exactamente la mitad.
De esta manera, las diferencias son notabales. Primeramente, con tan solo una victoria más ya se habrían igualado los triunfos del curso pasado. Por otro lado, en Copa del Rey se quedó en dieciseisavos ante el Rayo, mientras que ahora se encuentra a la espera de su rival en octavos.
Por consecuente, los números son abrumadores y tan solo corroboran la mala gestión del último entrenador que pasó por Heliópolis.