Rodrigo Sánchez es una de las grandes perlas que atesora el Real Betis en su haber. Proyección, técnica, magia y calidad por doquier auguran de él un buen proyecto como futbolista. En la presenta temporada, una lesión en el mejor de sus momentos le envió al dique seco, y desde entonces no ha vuelto a su mejor nivel. Si bien, el parón de selecciones le vino que ni pintado para resarcirse ante Lituania con un par de chicharros para desquitarse.
Su pasión por el Betis
En una entrevista para El Desmarque, el futbolista de Talayuela ha expresado su amor incondicional hacia las «Trece Barras». Así, a la pregunta sobre qué ha cambiado desde su debut en Heliópolis el futbolista respondió: «Quiero aún más al Betis y que estoy orgulloso de lo que está haciendo este equipo. Tenemos un final de año muy ilusionante. El Betis te cala dentro, es alegría de vivir. No es un club de fútbol, es un sentimiento. La gente lo vive a lo grande y es algo que se transmite desde todas las estructuras, grada… Deportivamente la apuesta por este estilo de juego ha encajado a la perfección. Yo me siento muy valorado y quiero devolver la confianza que ha puesto el Betis en mí».
Crecer en el club
Además del sentimiento que aguarda, el futbolista no dudó en reconocer su admiración hacia los profesionales con los que comparte vestuario: «Solo soy el principio de lo que puedo llegar a ser. Estoy en crecimiento, pero es más fácil con jugadores como Canales, Joaquín pues son un espejo donde mirarse. Todo el mundo define nuestro medio campo por la calidad y el talento, pero si ves todo el esfuerzo y compromiso que le meten detrás, te quedas alucinado. Este equipo está repleto de talento».
La Final de Copa
A finales de abril los de Pellegrini tienen una cita con una antigua amiga. Todos los jugadores tienen ilusión por ganarla, aunque se muestran humildes. En este sentido, Rodri fue claro: «No me imagino aún levantando la Copa, primero hay que jugarla. Los títulos no se tocan hasta que se ganan». Así, en esta línea, el futbolista habló sobre el maravilloso momento que vivió en las Semifinales: «Me acordé de todos los que nos han ayudado y los que me han apoyado. Es mi primera final. Vivir este día a día hasta que llegue me parece emocionante».
La lesión, en el peor momento
Rodri cayó lesionado en noviembre, y desde entonces vio afectado su rendimiento. En este sentido, aquellas molestias en el tobillo le vienen perjudicando y él es consciente: «Es cierto que empecé muy bien y fue un traspiés la lesión. Una de esas curvas del camino que no puedes controlar cuando todo va perfecto. Seguro me da aprendizaje».
Posición en el campo
A Rodri le hemos visto jugar en la mediapunta, en ambos costados, e incluso, jugando con libertad de movimiento en la zona de 3/4. Pellegrini, por la gran variedad de futbolistas que tiene de su perfil, lo ha ido rotando en torno a todas estas posibles posiciones en el campo. No obstante, donde mejor se encuentra es en el extremo diestro. «Trabajo para crecer en todas las facetas y ganar presencia en el campo. Me siento bien jugando, sea donde sea. En las tres posiciones ofensivas me puedo desenvolver bien. La posición de extremo derecho me gusta mucho, es donde me siento más cómodo. Tengo más libertad para meterme por dentro, encarar…», expresó el cacereño.
Actuación con la Selección
En este último parón, en los partidos clasificatorios para el Europeo Sub-21, tanto Juan Miranda como él fueron correspondidos con la convocatoria. Con todo, fue el mediocentro quien acaparó todas las miradas, pues el de Olivares no disputó minutos en el primer encuentro y fue sustituido tras un golpe en el segundo. Es por ello que la actuación magistral del joven mediapunta con su doblete eclipsó la pobre actuación del lateral.
«Jugar con tu selección siempre es especial. Marcar dos goles en un partido clasificatorio (contra Lituania), delante de nuestra gente, es un sueño cumplido. Uno trabaja con la ambición de vivir noches así. El estilo de España favorece que surjan talentos nacionales. Es un privilegio estar entre ellos».
